Mantuvieron una reunión con el técnico y los jugadores para reclamarle una reacción para evitar el descenso
18 may 2008 . Actualizado a las 02:15 h.El celtismo está caliente. El riesgo de descenso ha disparo las alarmas. Por eso media docena de integrantes de la Peña Comando Celta bloquearon la salida de los jugadores de las instalaciones de A Madroa en la mañana de ayer. Depusieron su actitud después de una hora tras entrevistarse con el entrenador y con los capitanes, a los que le pidieron una reacción para esta tarde para evitar que el equipo pueda acabar en Segunda B.
El grupo en cuestión colocó en el portalón de entrada de las instalaciones de A Madroa una pancarta con el lema «Ata os collóns» y cruzaron un coche para evitar la salida de los vehículos de los futbolistas. Curiosamente el recinto no tiene vado y por lo tanto el coche no estaba cometiendo ninguna ilegalidad aparente. Su intención desde el primer momento era hablar con la plantilla para reclamarle máximo compromiso.
Los jugadores tuvieron conocimiento de la pancarta nada más finalizar el entrenamiento del sábado, poco después de las once y media de la mañana. Toda la plantilla permaneció en el vestuario durante más de una hora a excepción de Luis García y Rubén, que se dejaron ver por el párking. El santiagués incluso llegó a encender su coche.
Desde el principio el jefe de prensa del Celta José Carlos Bastos actuó de interlocutor, y pasadas las doce y media de la mañana los cinco aficionados fueron recibidos por el técnico Alejandro Menéndez. El asturiano destacó el trabajo psicológico que se había realizado a lo largo de toda la semana y les indicó que «se había acabado el cachondeo y que la plantilla había aligerado la mochila». En clave psicológica se entiende. Les prometió también máxima implicación para esta tarde y les pidió que sumasen de cara al partido, algo que ya había comentado en la víspera.
«Estos aficionados pueden estar molestos como todos, pero no hay más allá que animar al grupo y sumar y estar todos juntos para buscar el final de temporada que todos queremos», comentó más tarde Menéndez.
Los argumentos, y el acuerdo de mantener minutos después una reunión con los capitanes, debieron convencerles porque nada más salir de la entrevista con Alejandro Menéndez los aficionados retiraron la pancarta y desbloquearon la salida. Mientras esperaban incluso mantuvieron un intercambio de palabras con Pedro Posada, el único consejero que se pasó ayer por el entrenamiento, y que seguía el acontecimiento departiendo con los periodistas.
Al filo de la una de la tarde Esteban, Perera, Jorge y Canobbio en su calidad de capitanes mantuvieron el encuentro con los peñistas. Su portavoz le reclamó máxima implicación y les recordó la situación del equipo. El portero Esteban le hizo saber que hoy comenzaba para ellos una nueva Liga de cinco partidos y que no les iban a defraudar. Enseguida sellaron la paz.
El portavoz de la peña apuntó a la conclusión que la intención del acto era sumar y cargar las pilas para esta mañana «sin ánimo de montar jaleo». No obstante, precisó que «de momento son palabras pero nós o que queremos é que falen eles pero no campo». Su acción pudiera no ser la última.