25 feb 2008 . Actualizado a las 02:00 h.
La derrota en Las Palmas tuvo consecuencias inmediatas. El presidente y los dos consejeros que le acompaban, Antonio Rosendo y Primitivo Ferro, se reunieron con los jugadores en el vestuario y después durante la cena en el hotel de concentración. «Vamos a sufrir mucho pero el próximo por sus características es un partido muy especial. Si lo sacamos adelante, estaríamos ahí otra vez. Después del partido y durante la cena hablamos con los jugadores y siguen teniendo una motivación enorme. No están saliendo las cosas pero están todos convencidos de que el objetivo se puede alcanzar».