«¿Si hubo milagro? Hubo un error», pica el bicampeón español al inglés

La Voz

DEPORTES

08 oct 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

Antes de subir al podio, los periodistas asaltaron a Alonso. «¿Hubo milagro?», le preguntaron. «¿Si hubo milagro? Hubo un error», espetó con media sonrisa. Lanzaba así un puyazo verbal a Lewis Hamilton, que se salió de la pista en una maniobra impropia de un piloto de su talla.

Hubo recados para todos. En declaraciones exclusivas a Telecinco, el bicampeón del mundo se atrevió ayer a asegurar lo que 24 horas antes no se atrevió a decir, aunque lo sospechaba. Que en la clasificación del sábado la presión de sus neumáticos «era excesiva». En todo caso, dio por zanjado el incidente «porque hay que pensar en Brasil y no podemos seguir dándole vueltas». Mientras, Ron Dennis seguía negando ayer la existencia de cualquier tipo de anomalía en la citada sesión: «¿Qué problema hubo? La presión de los neumáticos estaba perfectamente y la vuelta de Lewis fue muy buena, eso es todo».

El sentimiento, en contra

En la rueda de prensa oficial, Alonso estuvo mucho más comedido. Le preguntaron si tiene pensado hablar con el equipo estos días. «Estoy convencido de que va a haber igualdad. Una cosa es lo que sientan, lo que hablen mal de mí, y otra es lo que pongan sobre la pista, que han sido dos coches exactamente iguales, capacitados para la victoria y eso es lo que va a pasar en Brasil». «Creo que al final los coches van a estar igual, van a dar las mismas oportunidades a los dos. Pero sabemos que el sentimiento nunca va a ser favorable hacia mí», reiteró después.

Alonso ya echado cuentas: «Tengo más esperanzas, pero llegamos en una situación muy difícil: cuatro puntos por detrás, necesito hacer primero y Hamilton tercero y si no otra combinación rara. Viendo las últimas carreras, siempre hemos ido los Ferrari y los McLaren muy juntos. Por tanto, ganar la carrera y meter un Ferrari por el medio es una tarea que se antoja casi imposible y eso es lo que vamos a intentar, hacer posible lo imposible».

Sobre la carrera, explicó que se enteró de la retirada de Hamilton por las pantallas gigantes del circuito, y que lo primero que pensó fue que tenía que acabar la carrera: «Ya valía cualquier resultado. Si fuese séptimo ya valía, ya salvaba la bola de partido que tenía aquí y llegaba a Brasil con alguna opción. Por tanto, después de su abandono, sólo intentaba mantenerme en la pista. Las condiciones eran delicadas y había que terminar la carrera como fuera».