Gómez Noya se pone a prueba en el circuito de los Juegos

Andre Rodes

DEPORTES

15 sep 2007 . Actualizado a las 03:02 h.

Javier Gómez Noya empieza a sentirse a sus anchas en Pekín. Esta es la segunda vez que el atleta ferrolano acude a la capital china para participar en la Copa del Mundo de Triatlón, que tendrá lugar mañana a partir de las cuatro de la madrugada hora española, en el mismo circuito donde se celebrarán el próximo agosto las pruebas olímpicas de esta modalidad deportiva. El campeón de Europa y subcampeón del mundo, que lidera de forma clara la general de la Copa del Mundo, ya ha tenido la oportunidad de familiarizarse con las aguas del pantano de Sishangling donde disputará las pruebas de natación, los 40 km de circuito ciclista y los 10 km de carrera a pie junto a las tumbas centenarias de la dinastía Ming.

Buenas instalaciones

«Las condiciones de las instalaciones son óptimas y no han cambiado respecto al año pasado», dice el triatleta ferrolano. Lo único que ha notado diferente es que han plantado más árboles alrededor del circuito. «Teóricamente, los árboles tendrían que paliar los efectos de la contaminación, pero tengo la sensación de que la humedad y la polución son aún más intensas que el año pasado, quizás por culpa de la lluvia que está cayendo estos días», explica Javier Gómez Noya.

Pese a que las temperaturas en Pekín durante esta semana han sido más suaves que a mediados de agosto, el mes en el que se celebrarán los Juegos Olímpicos en la capital china, el triatleta ferrolano cree que no tendrá problemas para aclimatarse: «Al ser gallego, estoy más acostumbrado a competir con humedad que algunos de mis rivales». «Pero tampoco yo estoy habituado al calor excesivo», puntualiza. Para el triatleta gallego, la hidratación es fundamental para combatir estos inconvenientes climáticos, especialmente durante la prueba ciclista, y así poder resistir mejor los últimos 10.000 metros de carrera a pie, el sector en el que está acostumbrado a marcar las diferencias.

Raña y Pilar hidalgo

El equipo español de triatlón, en el que están también los gallegos Iván Raña y Pilar Hidalgo, llegó a Pekín el lunes y está alojado en un complejo hotelero muy cerca del lugar en el que se disputarán las pruebas. «Mi cuerpo empieza a recuperarse del cansancio del viaje y a adaptarse al cambio de horario», asegura el subcampeón el mundo, que confía estar en plena forma mañana. Cada participante mantiene la misma rutina de entrenamientos: «Carrera por las mañanas, reunión técnica con el entrenador al mediodía y por las tardes voy a nadar», explica.

Los participantes sólo disponen de la piscina del hotel para entrenar y ese ha sido una de las pocas quejas a la organización pekinesa. «Los organizadores chinos quieren hacerlo todo tan bien que pueden resultar hasta pesados», bromea el triatleta ferrolano. De cualquier forma, a nivel general, el equipo está satisfecho por el trato y por la organización. «En el restaurante siempre hay arroz y pasta, y procuran cocinar con menos salsas para adaptarse al gusto occidental», concluye Javier Gómez Noya.