El Sergas se reunirá el lunes con la dirección del centro para fijar una estrategia con la que negociar el concierto
05 nov 2010 . Actualizado a las 12:09 h.El presidente de la Xunta cargó ayer con contundencia contra los planes de Povisa de despedir a 1.200 trabajadores. «Espero -dijo Alberto Núñez Feijoo cuando se acababa de conocer que el hospital privado presentará un ERE- que non se utilice á plantilla en contra de ninguén», en clara referencia al Servizo Galego de Saúde, con el que el hospital del grupo Nosa Terra debe negociar un concierto económico para atender a 143.000 usuarios del Sergas del área de Vigo. El último se elevó a 73 millones de euros.
El acuerdo actual se firmó en el año 2000 con una vigencia de ocho años prorrogables a otros dos. El próximo 31 de diciembre habrá vencido. El Sergas sabe que en este momento no puede cubrir la atención sanitaria del área viguesa sin Povisa: la propia conselleira, Pilar Farjas, destacó ayer en A Coruña la «alta calidad» del complejo vigués. Y el hospital es consciente de que sin su mayor cliente (supone aproximadamente el 80% de su facturación) no puede sobrevivir con la estructura que tiene: la próxima semana, probablemente el día 15, va a plantear un ERE extintivo de 800 contratos, a los que se unen 400 que están directamente vinculados al concierto.
Habrá negociación del nuevo acuerdo económico. Pero estará marcada por los 1.200 empleos que están sobre la mesa, sobre una plantilla de 1.500. El presidente de la Xunta sugirió ayer que precisamente en el dinero está el origen del conflicto con el hospital. «Nunha negociación, as dificultades, normalmente, veñen porque unha parte quere máis e á outra non lle parece razonable», deslizó Feijoo en la rueda de prensa posterior al Consello de la Xunta. Además, aseguró que su objetivo es «manter o maior número de empregos» en el hospital privado.
El lunes, Povisa y el Sergas se verán las caras en Santiago. Habrá una reunión para establecer un grupo de trabajo y un cronograma.
Nueve reuniones
Pero no existe acuerdo es sobre el punto de partida de las negociaciones. Porque desde el hospital privado aseguran que solo hablaron con el Sergas sobre el nuevo concierto el 27 de octubre, y fue «de forma general». Mientras, Feijoo señaló que la Xunta sigue «sentada en la mesa» y que lleva meses negociando.
De hecho, según fuentes oficiales del Sergas, a lo largo de este año se han producido ya nueve reuniones: en los meses de enero, febrero, marzo, abril, mayo, junio (dos encuentros), julio y octubre. Todas ellas, según el organismo sanitario, fueron «reuniones técnicas para abordar el concierto». Además, señalan las mismas fuentes, ha habido otros encuentros en la relación habitual entre la gerencia del Sergas y el hospital.
«Ninguna de esas reuniones tenía nada que ver con el nuevo concierto», alegan por su parte en Povisa. Desde el hospital indican que los encuentros técnicos son habituales porque ya existe un concierto económico en la actualidad y porque el hospital atiende a los ciudadanos de O Morrazo, O Val Miñor, Coia, Coruxo y López Mora.
Ayer se vieron
Ayer sí se produjo una nueva reunión en el que la dirección del hospital vigués explicó al Sergas sus intenciones de despedir a 1.200 trabajadores, que se publicaban ayer mismo. Desde el organismo sanitario aseguran que «se le volvió a pedir a Povisa conocer sus propuestas sobre tiempos de espera, cápitas y servicios». Pero, según un portavoz, el Sergas sigue a la espera.