El vicepresidente del club, Ricardo Barros, asegura que los motivos de su salida han sido personales
25 oct 2007 . Actualizado a las 11:04 h.Ricardo Barros, vicepresidente del Celta, ha sido la única voz autorizada del club vigués que ha querido valorar la marcha de Xavier Martínez Cobas. La salida del hasta ahora director general del club responde a una decisión personal y no alterará el funcionamiento del club, según explicó ayer a este diario, el dirigente céltico.
«Ha sido un cambio que en cualquier empresa se asumiría con normalidad. Esto no va a afectar nada. Xavier presentó su dimisión y se está buscando otro perfil para ahí», comentó Ricardo Barros. Para encontrar los motivos de su salida tras sólo un año y medio en el cargo, el vicepresidente del Celta aclara que la relación con el aún director general es excelente y da como prueba la oferta que ha recibido para mantenerse como responsable de la Fundación del club. «El fútbol quema mucho y estás todos los días en la palestra. Después de llevar un año y medio poniendo las cosas como pretendíamos, ha tomado una decisión. Nos ha cogido por sorpresa a todo el mundo. Se está hablando con él para que si no sigue en la dirección general, que al menos continúe llevando la Fundación. Si fuésemos tan malos, seguro que ya hoy no estaría en el club».
Motivos de carácter personal, es lo que subyace de una salida inesperada para todo el Consejo de Administración. «A mi me ha llamado la atención su marcha porque estoy todos los días con él. Ha estado una temporada con temas personales. El Celta no es una empresa que se coma a todo el que está, estaba o al que pueda entrar. No somos tan ogros. Si no se dice más, es por respetar la intimidad de cada uno».
Para Ricardo Barros, Martínez Cobas en el tiempo de estancia en el cargo ha cumplido el cometido que se le había encomendado en su día. Además aclara que si la situación económica no ha mejorado, al menos ahora son conscientes de las complicaciones que atraviesan como entidad. «Totalmente. No digo que estemos mejor económicamente, pero se ha hecho un trabajo de poner la situación del club al día que está terminado. Ya sabemos la realidad que va a tener esta entidad. Es una realidad bastante complicada».
Barros desmintió que la marcha de Cobas tenga que ver con la situación económica del club ni con desavenencias personales con consejeros. «Su decisión no tiene nada que ver con el estado del club, ni con que su relación conmigo sea mala como he leído en algún sitio. Xavier es mi amigo y cuando me dijo que se iba le dije que tenía un amigo para lo que necesitara».
También descartó la posibilidad de que se produzcan próximamente salidas de integrantes del Consejo de Administración a pesar de que se haya especulado con esta posibilidad. «El Celta parece que es la casa de los locos. Cualquier compañero de Consejo está contentísimo con como se están haciendo las cosas. Que mañana se marcha uno u otro..., la verdad es que me sorprendería muchísimo».