Los afectados por el amianto en el área de Ferrol pueden superar los 6.000

Francisco Varela FERROL/LA VOZ.

SOCIEDAD

Son trabajadores en activo o jubilados de los astilleros, sin contar los de la construcción y el automóvil

18 jul 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

El Sergas ha citado a consulta a más de cinco mil trabajadores prejubilados de los astilleros de Navantia en la ría de Ferrol para ser examinados por el servicio de neumología del hospital público local. En realidad, el astillero ha remitido a la sanidad pública una lista de 6.007 posibles afectados, es decir, personas que tuvieron algún contacto con el asbesto durante su vida activa. De ellos, un millar, aproximadamente, están ya bajo control de este servicio, por lo que restan otros cinco mil por pasar los exámenes.

Quedan los trabajadores ya jubilados, cuyos casos van surgiendo poco a poco, o los que están en activo, cuyo control está bajo la jurisdicción de la propia empresa. Según el médico ferrolano Carlos Piñeiro, especializado en salud pública y experto en esta materia, el número de enfermos que se detectarán puede llegar a los cinco mil. Una cifra que se mantendrá en las dos próximas décadas. Son, en su gran mayoría, del sector naval, porque el amianto se utilizó con profusión en el aislamiento interior de los barcos hasta 1982, pero quienes se contaminaron y tienen los microcristales de asbesto en sus pulmones pueden desarrollar asbestosis y otras enfermedades hasta veinte años después.

Cristóbal Carneiro Mella, presidente de la asociación de afectados Agavida, ha recordado que dos miembros de su directiva han fallecido por esta causa. Uno de ellos, Paulino Pereira Calvo, había sido un conocido jugador de balonmano, pero el amianto acabó con él. De todos modos, estas cifras corresponden al sector naval, donde el trabajo de los sindicatos y las asociaciones ha conseguido que aflore el problema, pero permanece oculto en la construcción.

La fábrica de Cerdanyola que ha sido noticia porque tendrá que indemnizar a vecinos próximos afectados pertenecía a Uralita, la principal empresa de fabricación de planchas de fibrocemento, conocida también por uralita . Pues bien, hasta el año 2000, explica Carneiro, se siguió fabricando la uralita con asbesto y cemento, y en los tejados de todo el país hay miles de toneladas. Es lo que Ángel Cárcoba llama «amianto instalado». ¿Quién no ha visto a un albañil cortando con una radial una plancha de fibrocemento, reparando un tejado, para ajustarla a un espacio? Lo más probable es que haya quedado contaminado porque las microfibras atraviesan las mascarillas utilizadas habitualmente como medida de seguridad. Todos estos trabajadores no han sido examinados todavía. Cárcoba, en su conocido libro sobre el amianto, recuerda que en marzo de 1977 varios sindicalistas de las nacientes CC.?OO. de la fábrica catalana denunciaban ya el problema. España se incorporaba tarde porque en EE.UU. y Europa el asunto ya era conocido.

En Ferrol, los tribunales son reflejo de esta situación, con numerosas demandas ante los juzgados de lo Social. Se trata de trabajadores en activo o pensionistas ya, o sus familias, si han fallecido, que reclaman indemnizaciones por las enfermedades que sufren. Mientras tanto, la empresa Navantia suele atribuir los males al tabaco y recurre los fallos favorables.