El temporal provocó en la ciudad persistentes apagones y caídas de árboles, vallas, carteles y piezas de fachadas
25 ene 2009 . Actualizado a las 02:00 h.Su entrada fue lenta, pero implacable. El anemómetro de la estación meteorológica de la Universidad empezó a registrar la entrada del temporal a las ocho de la tarde del viernes y, cada diez minutos, marcaba nuevos incrementos. El punto más intenso se registró a las diez de la noche, cuando alcanzó los 115 kilómetros por hora. La marca de cien kilómetros se mantuvo en gran parte de la franja horaria entre las once de la noche y las tres de la madrugada. Fuentes de la estación meteorológica informaron que no se recuerdan rachas tan fuertes y durante tanto tiempo en Santiago desde el ciclón Hortensia en 1984.
La fuerza del viento provocó daños cuantiosos en numerosos puntos del municipio de Santiago. Los barrios y parroquias de la zona norte, así como las de Marrozos y algunos puntos de Santa Lucía, Villestro y Laraño vieron interrumpido el servicio eléctrico alrededor de las nueve de la noche, debido a la caída de árboles y ramas sobre los cables de media y alta tensión. A última hora de ayer, el suministro continuaba cortado y fuentes de Fenosa no podían precisar cuándo se podría restablecer el servicio. En Meixonfrío y San Caetano también se registraron apagones, pero el servicio se restableció en las primeras horas de la mañana. Las velas y cartuchos de gas para candiles se agotaron en los establecimientos de la zona. Muchos vecinos de las áreas afectadas mostraron su indignación por el retraso en la reparación de los daños. En determinadas zonas aseguraban llevar ya veinte horas sin luz. Asimismo, se produjeron problemas en las comunicaciones telefónicas fijas y móviles, que tampoco estaban repuestas ayer por la noche.
En las vías, los bomberos y personal de la Xunta se emplearon a fondo toda la jornada para retirar los árboles que cayeron sobre la calzada del Pedroso, Brins, Figueiras, Villestro y Marrozos. En el Campus Sur cayeron, al menos, tres árboles. Uno de ellos mantiene la rúa do Burgo (la del IES Xelmírez I) cortada. En los parques públicos y en las inmediaciones del colegio Santiago Apóstol y el vivero municipal en Lamas de Abade también cayeron árboles.