El cambio de concesionaria en el servicio municipal de limpiezas de Ourense no solo se ha dejado sentir en la calle, puertas afuera, con un plan de choque inicial, el cambio de uniformes y la gradual introducción de mejoras, sino también puertas adentro. En dos semanas de actividad, la firma responsable de la limpieza y recogida de basuras ha tramitado más amonestaciones y sanciones disciplinarias que en los años anteriores.
Las que afectan a uno de los miembros del comité de empresa, siendo las más significativas por el hecho de que implican a un representante de este colectivo de casi dos centenares de trabajadores, no han sido las únicas de esta primera etapa.
La actitud vigilante de la nueva dirección del servicio de limpiezas y recogida de basuras resulta especialmente llamativa en contraste con el proceder más permisivo que había caracterizado a Urbaser, la anterior concesionaria. En Ecourense, nombre comercial de la unión temporal de empresas formada por FCC, Copasa y Geseco, han optado por introducir cambios en las relaciones con los trabajadores.
Las amonestaciones y medidas disciplinarias en la etapa de Urbaser eran escasísimas. La única sanción significativa de los últimos años se impuso en el 2009 a un conductor, a quien la dirección reprochó más que el accidente en sí mismo, el hecho de que intentase ocultarlo. Había ocurrido en el interior de las instalaciones de San Cibrao das Viñas, al golpear con el vehículo una de las vigas de la nave.
Detalles de daños
Con anterioridad, la misma empresa se había limitado algún año a ofrecer a los empleados el detalle de los daños contabilizados en el período, sin llegar a la amonestación personal.
En los dos últimos meses, sin embargo, la actual concesionaria ha formalizado media docena de expedientes disciplinarios internos, en ningún caso graves, pero con suficiente eco como para que los operarios estén percibiendo un cambio de actitud.
La actuación empresarial representa un muy notable cambio en el tono de las relaciones laborales, que en la última etapa de Urbaser se habían enrarecido, sobre todo desde el momento en que empezó a trascender que perdía opciones para continuar con un servicio recibido tras sucesivos cambios empresariales en Semat y Onyx.
La sanción impuesta al sindicalista de USO que supuestamente vació el contenido de un contenedor amarillo de recogida selectiva en el camión de la basura orgánica, ha sido recurrido por el afectado. Al no haber aceptado la empresa la conciliación en el servicio de mediación de la Xunta, el asunto acabará en un Juzgado de lo Social.
Por otra parte, los trabajadores de limpiezas de Ourense han podido cobrar en la nómina de mayo los atrasos que arrastraban de años anteriores.