La Guardia Civil sospecha que Resistencia Galega voló el cajero de O Rosal

Alejandro Martínez, E.V.P. O ROSAL / LA VOZ

VIGO

Bandallo

La deflagración provocó una onda expansiva de tal potencia que lanzó una puerta contra un supermercado y despertó a todos los vecinos del centro urbano

11 mar 2013 . Actualizado a las 15:12 h.

Una explosión ha destrozado a las cinco en punto de esta mañana el cajero de la sucursal de la entidad financiera Novagalicia Banco en el municipio de O Rosal. La Guardia Civil sospecha que el grupo Resistencia Galega podría ser la autora de la explosión, según indicó un portavoz de la Subdelegación del Gobierno de Pontevedra.

Decenas de vecinos se vieron sobresaltados a esa hora por «un gran estruendo, pensábamos que era un trueno, pero al acercarnos a la ventana el olor a quemado y el humo lo envolvía todo». Una vecina, que bajó atraída por el ruido de los curiosos, dice que pasó frío en la calle mientras la zona estaba acordonada por más de una decena de agentes de los distintos grupos especializados de la Guardia Civil. Les respaldó el equipo especialista en desactivación de artefactos explosivos Tedax y con el apoyo de perros.

Desalojo

La explosión fue tan grande que además de despertar a todo el centro urbano de la villa, ya que la entidad se encuentra casi en la céntrica plaza del Calvario, los daños materiales afectaron a otros inmuebles de la zona. Según testigos presenciales, la puerta del cajero salió disparado a más de 30 metros de distancia y la luna de un supermercado situado en la otra acera también quedó destrozada.

«Fue como un trueno», aseguró la vecina del ático. Otros señalan que la potencia de la explosión fue tan fuerte que lanzó por los aires una puerta.

Al parecer, hubo que desalojar tanto a los vecinos que residen en la planta superior de la entidad como a los de otros edificios colindantes. Los hechos precipitaron la salida al centro de la pequeña villa de decenas de vecinos que no regresaron a sus casas hasta casi dos horas después. En el lugar de los hechos permanece desplegado un amplio dispositivo de seguridad.

También ha habido incidentes en Ponteareas, donde la quema de unos neumáticos obligó también a movilizar a los dispositivos de emergencia.

Desescombro

Miembros de Protección Civil de A Guarda acudieron a las 7.00 horas a desescombrar y emplearon cinco horas en retirar piedras del marco de la puerta y cristales de la oficina, un supermercado Froiz, la acera y la carretera. Un portavoz relató que la onda expansiva fue tan fuerte que lanzó una puerta del cajero contra el supermercado de enfrente, situado a 100 metros. Los cristales se clavaron en su el letrero del anuncio del comercio.

La explosión destruyó prácticamente la parte alta del cajero pero no dañó la caja fuerte.

Los investigadores buscaron pruebas entre los escombros y se llevaron varias piezas para analizar. Aún no ha trascendido qué tipo de explosivo fue usado aunque no era inflamable porque los vecinos no vieron llamaradas sino un humo blanco. Esto apunta a que el artefacto era de deflagración y con una potente onda expansiva.

Investigación

Portavoces de la Subdelegación precisan que la autoría, «con todas las cautelas», podría ser de Resistencia Galega por «los indicios» que ha hallado la Policía Judicial de la Guardia Civil y los especialistas en la desactivación de explosivos Tedax.

Por el momento, la Subdelegación mantiene mutismo sobre qué tipo de explosivo y artefacto fue utilizado e ignora si los implicados dejaron una nota o paquete sobre el cajero para avisar de que había una bomba, como suele ser habitual en el modus operandi del grupo.

Los vecinos consultados también recuerdan haber visto sospechosos a esas horas de la noche ni ruidos extraños pero los agentes inspeccionarán.

Neumáticos en la A-52

Asimismo, la Guardia Civil desvincula esta explosión de la barricada con neumáticos que cortó momentáneamente los dos carriles de la autovía A-52 en Ponteareas apenas media hora más tarde.

El subdelegado del Gobierno en Pontevedra, Antonio Coello, ha declarado a EFE, tras visitar el municipio de O Rosal y comprobar los daños provocados por la explosión, que la Guardia Civil le ha trasladado que ambos actos no tienen ninguna conexión.

Declaraciones de una vecina

Dolores Martínez, vecina del inmueble, relató a VTelevisión que «se oyó un estruendo, yo estaba durmiendo y creí que era un trueno. Vi también que se fue la luz del reloj y escuché a los chicos de abajo, porque en la casa solo estamos dos familias. Me asomé al balcón y vi todo tirado. Pensé que era un coche que se empotró. El ruido fue fuerte, pero estamos aquí para contarlo. Fue un temblor grande, pero hay que se olvidar».

La mujer bajó a la calle para ver los destrozos. «Yo tenía mucho frío, que estaba una mañana perra», contó.