La decoración del Sibuya, con 60 establecimientos en España, se realiza contrarreloj para inaugurar el 8 de junio en el bajo del histórico edificio de Santiago
07 jun 2023 . Actualizado a las 22:03 h.El inmueble del histórico restaurante Asesino será ocupado por Sibuya, una franquicia de comida japonesa que tiene 60 restaurantes en España, uno de ellos en Ourense de reciente inauguración. La solidez del grupo Sibuya fue determinante para que Antonio Riveiro, propietario del histórico edificio que hace esquina entre Mazarelos y la Praza da Universidade, accediera a alquilar el bajo a esta empresa. La inauguración se prevé para el próximo jueves, 8 de junio, y ya es posible reservar mesa para ese día. Durante estos días, los obreros trabajan contrarreloj para terminar la decoración del restaurante y completar las instalaciones de la cocina y de la sala del local. Una decoración que empieza a vislumbrarse, y en la que el contenido vegetal estará muy presente.
Antonio Riveiro reconoce que cuando entró por vez primera en el edificio del Asesino, después de retirar escombros y basura, «se me vinieron abajo los planes de recuperarlo; no quedaba nada, todo había desaparecido, y pensé que nada de lo que yo pudiera hacer iba a servir para recuperar al restaurante histórico». El empresario recuerda que había «restos de un incendio y un colchón usado por indigentes. Con las catas tuve la esperanza de que apareciera algo para tirar de ahí, pero solo encontraron unos tenedores de aluminio».
El origen del restaurante Asesino se remonta a 1873, cuando Bernardo García Valeiras y Esperanza González Corral, de O Carballiño, abrieron un local en la vieja estación de Cornes. El éxito fue tal que se animaron a dar el salto al casco histórico. Las tazas que servía Bernando se acompañaban de la comida de Esperanza, que estuvo en el establecimiento hasta los 95 años. Al fallecer se lo dejó a su hija Isaura, pero sería su nieta Lola Neira la que siguió en el negocio junto a su hermana Maruja. Luego pasaron dos hosteleros más, pero ya no fue lo mismo.
El aspecto y ambiente de la plaza tampoco animó al empresario para crear un espacio hostelero, y la solución le llegó de la mano de los propietarios de Sibuya. Riveiro compró el edificio en el 2018, y el primer contacto con los propietarios del restaurante japonés fue en el 2019. Después llegó el covid, y «no volvimos a hablar hasta que en el 2022 vinieron al Casino [el café de la Rúa do Vilar que también gestiona Antonio Riveiro], y casi se cerró la operación. Querían un local que pudieran preparar desde cero. Firmamos el pasado mes de febrero, aunque todo estaba negociado de antes».
El restaurante ocupará toda la planta baja del inmueble, que cuenta con tres pisos superiores, que seguirán en manos de Antonio Riveiro. En estas tres plantas se están acondicionando cinco apartamentos, cuatro de ellos en las plantas primera y segunda, y el quinto en el ático. La previsión es que todas las obras están terminadas en septiembre, con el fin de que, salvo el del ático, puedan sacarse al mercado para el alquiler a estudiantes en el inicio del curso. Antonio Riveiro explicó que este modelo le permitirá la opción de destinarlos al alquiler vacacional en los meses de julio y agosto.
HISTORIA DE SANTIAGO
El restaurante de los estudiantes y de escritores como Valle-Inclán, García Lorca o Machado
Aunque de él queden poco más que las fachadas y parte de su estructura interior, con la recuperación del edificio del Asesino, Santiago rescata un pedazo de su historia, relacionada con el mundo literario y con la estudiantina del siglo XIX y principios del XX porque, como dijo a finales del 2000 la responsable de sus fogones, Maruja Neira, en una entrevista en La Voz, el que hasta su cierre en el 2012 era el restaurante más antiguo de Santiago empezó ofreciendo vino del Ribeiro a los universitarios. De alguna manera, la nueva vida para el edificio situado frente a la Facultade de Historia enlaza con sus orígenes, toda vez que su promotor, el hostelero José Antonio Riveiro, prevé dedicar las plantas superiores a apartamentos en alquiler para estudiantes.
El Asesino fue, en 1929, el primer restaurante gallego citado en la Guía Michelin. Eran años dorados para la casa de comidas, que fue en esa época y durante la década de los años 30, frecuentada por la flor y nata del mundo literario español. Uno de sus habituales fue Ramón María del Valle-Inclán, al que llegó a conocer la propia Maruja Neira y que tenía reservada para él una mesa junto a una ventana. Wenceslao Fernández Flórez, Antonio Machado, Miguel de Unamuno y Federico García Lorca también disfrutaron del buen comer y beber del restaurante.
Al parecer, ha desaparecido el popular rótulo del Asesino, pero quedará en el recuerdo el nombre del local, ya una leyenda, y su origen: lo bautizaron los estudiantes, cuando vieron a un empleado de la cocina salir corriendo, cuchillo en mano, tras un gallo que huyó cuando iba a sacrificarlo, y empezaron a gritarle: «¡No lo mates, asesino!».