«Paquirri no encontró su sitio»

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

El empresario Lozano prevé mantener el mismo formato de corrida el próximo 2018

15 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Cuando apenas se han apagado los ecos de la feria taurina de A Peregrina, el empresario Eduardo Lozano ya está pergeñando la que será la edición del 2018. «De momento, no tenemos ninguna intención de quitar ninguna de las corridas», remarcó, al tiempo que insistió en que «la crisis no se ha ido de Pontevedra todavía».

En este sentido, insistió en la idea de que «la crisis es el mayor enemigo de la fiesta, no los antitaurinos ni nada de eso. Si no te sobra el dinero, lo primero que sacrificas son los espectáculos de ocio. Esperamos que para el año que viene se vaya recuperando».

Pese a ello, dejó claro que la feria de A Peregrina, «tanto en el plano artístico, como en el económico, se ha defendido bien».Reseñó que la peor entrada se registró este domingo con la corrida que ponía broche a los festejos -«el público falló el último día»-, mientras que «los dos primeros días alcanzamos tres cuartos largos [de entrada] y estuvo bien».

En cuanto a la parte más artística, cuatro toreros consiguieron abrir este agosto la puerta grande del coso de San Roque. Así, el primer día, lo hicieron Antonio Ferrera y El Juli. «Fue muy exitosa -apunta Eduardo Lozano-. Salieron dos toreros a hombros y pudieron ser los tres, pero el presidente no le concedió la segunda oreja, bajo mi punto de vista merecida, a Roca Rey. Los tres dieron una tarde magnífica de toros y los astados de la ganadería Alcurrucén salieron muy buenos para los matadores».

Doble despedida

Si por algo será recordada, por su parte, la tarde del sábado es por el hecho de que fue la de la despedida de Pontevedra de Francisco Rivera Ordóñez, Paquirri. Lo cierto es que los adioses fueron por partida doble, toda vez que esta pudo ser la última lidia que dirigió el hasta ahora presidente de la plaza, José Manuel López, quien a finales de año se jubilará al frente de la Policía Autonómica de Pontevedra, cuerpo del que es jefe desde 1994.

Paquirri estuvo muy lejos de las grandes tardes que ha protagonizado en Pontevedra: «Estuvo un poquito bajo en su despedida. Se le pasó la tarde y no encontró su sitio». Por su parte, su hermano Cayetano «estuvo muy decidido y bien», si bien el revolcón que le dio Preferido «le mermó facultades, aunque se sobrepuso y tuvo una buena tarde».

El tercero del cartel, Diego Ventura, «estuvo sensacional. Fueron dos faenas de las que ya nos tiene acostumbrados, sobre todo la del segundo de su lote, que fue cumbre» y terminó cortando un total de tres orejas.

En la corrida del domingo, en la que Eduardo Lozano, había depositado «muchas ilusiones, los toros fallaron. Hubo dos buenos que le tocaron a Juan del Álamo, que salió por la puerta grande. Tanto Álvaro como Ginés Marín pudieron cortar una oreja cada uno en sus respectivos toros, pero fallaron con la espada».

Con respecto a la entrada registrada, el empresario lo vinculó al hecho de que la afición gallega es «joven»: «Salen por la puerta grande de Madrid estos dos toreros, que han sido los máximos triunfadores, pero aquí, como no se lee mucho de toros, no son conocidos. El año que viene los repetimos e irá más gentes a verlos. Está claro que a la gente joven hay que darles oportunidades».