Prisión para tres de los detenidos de la banda de estafadores de vehículos en Sarria

SARRIA

cedida

La Guardia Civil les intervino 12.000 euros en metálico y precintó 13 automóviles de alta gama

27 ago 2016 . Actualizado a las 00:21 h.

El juzgado de la localidad lucenses de Sarria determinó el ingreso en prisión de tres de los seis miembros de una banda organizada de estafadores dedicada a la venta de vehículos de ocasión. Otros dos quedaron en libertad con cargos y uno en libertad bajo fianza.

La organización estuvo asentada durante varios meses en Sarria y trasladó recientemente su logística a Castilla-La Mancha, desde donde vendían coches en todo el territorio nacional.

La operación se saldó con la intervención de 12.000 euros en metálico, abundante documentación. También se precintaron 13 vehículos de gama alta. La operación sigue abierta y no se descartan nuevas detenciones en fechas próximas.

Las denuncias de varios afectados por actividades ilícitas pusieron en marcha la investigación. El modo de actuar era ofrecer coches en Internet a precios bajos por los que los compradores tenían que adelantar el 50 o el 100 % del precio como reserva. En algunas ocasiones no recibían el vehículo y en otras las características diferían de la oferta.

Los integrantes de la banda contaban con un entramado de empresas que se constituían para la venta de vehículos, que se vendían a personas insolventes para no hacer frente a posibles denunciantes. Operaban en Toledo, Ciudad Real y Sarria.

«El perito y el concesionario me dijeron que no se podía arreglar»

Un afectado adquirió hace unos cuatro meses un Mercedes por el que pagó 12.500 euros. A las pocas semanas el vehículo le marcaba en el salpicadero «modo protección motor». Decidió consultarlo en un concesionario y el diagnóstico fue que el coche había sufrido un incendio, le faltaban piezas y otras estaban sujetas con bridas. «El concesionario y el perito me certificaron que no valía para arreglar», dice. Denunció el caso y solo obtuvo por el momento vagas promesas del taller sarriano que se lo vendió.