Mensajes en la cuneta donde apareció muerta Asunta: «Dinos desde tu cielo qué pasó con tus abuelos»
GALICIA
Flores, carteles y peluches en buen estado de conservación recuerdan a la niña en la pista forestal de Teo donde fue hallado su cuerpo
18 nov 2020 . Actualizado a las 17:03 h.Los faros de un coche alumbraron el cuerpo sin vida de una niña de 12 años tendido junto a una pista forestal de Teo. Fue en la madrugada del 21 de septiembre del 2013, horas después de que Rosario Porto y Alfonso Basterra denunciaran a la policía la desaparición de su hija, Asunta, que ellos mismos habían asesinado. En aquella cuneta de Feros, un cruce de caminos poco transitado y por el que solo caminan vecinos de la zona, se amontonan postales, peluches, pinturas y ramos que recuerdan hoy a la menor.
Este miércoles, minutos después de que su madre aparecise ahorcada en la prisión de Brieva, hay flores y cartulinas con mensajes en buen estado de conservación, por lo que habrían sido depositados allí recientemente. Entre ellos, un sobrecogedor mensaje: «Dinos, Asunta, desde tu cielo: ¿qué pasó con tus abuelos?». Y es que, con su muerte, Rosario Porto se lleva dos incógnitas con difícil respuesta: por qué terminó con la vida de su hija y qué causó, realmente, el fallecimiento de sus padres.
Los padres de Rosario Porto murieron con solo siete meses de diferencia, entre diciembre del 2011 y julio del 2012. Ambos eran mayores, pero no tenían enfermedades graves y ambos fallecieron de repente y en la cama. El asesinato de Asunta, poco más de un año después del deceso de su abuelo, levantó sospechas y algunas fuentes próximas al caso abrieron la posibilidad de iniciar una investigación sobre las causas que rodearon la muerte de los padres de Rosario. SIn embargo, los dos habían sido incinerados.
La cuneta donde fue hallado el cuerpo sin vida de la niña, que en septiembre hubiese cumplido veinte años, se encuentra a pocos minutos en coche del chalé donde fue asesinada. En la madrugada del 11 de octubre, la vivienda de tres plantas del lugar de Montouto fue consumida por las llamas de un voraz incendio.
El chalé fue el objetivo de los cacos y okupas con Rosario Porto y Alfonso Basterra ya en la cárcel. Actualmente se encuentra precintado, dada la inestabilidad de las estructuras, y lleva en venta desde un mes antes del crimen.
Por la mansión, de 400 metros cuadrados útiles y construida en una finca de 10.000 metros cuadrados que protege un alto muro, se pidió inicialmente una cantidad cercana al millón de euros, que después se rebajó prácticamente a la mitad. A día de hoy sigue sin interesados en su compra. La casa es la única de las propiedades que Rosario Porto puso a la venta y que no logró vender.