El presidente de Murcia asegura que dimitirá si es imputado

EFE

ESPAÑA

Marcial Guillén | efe

Pedro Antonio Sánchez firmó un acuerdo de investidura con Ciudadanos en el que se contempla la renuncia en caso de ser imputado por un caso de corrupción

17 feb 2017 . Actualizado a las 08:38 h.

El presidente del Gobierno de Murcia, Pedro Antonio Sánchez, se comprometió este jueves en el parlamento murciano a cumplir su palabra y, «sobre todo, la ley», al ser preguntado por C's si dimitirá en caso de que sea imputado en el caso Auditorio o en la rama murciana de la operación Púnica. «Yo siempre cumplo mi palabra y, sobre todo, la ley», respondió Sánchez en la sesión de control al Gobierno autonómico en la Asamblea Regional a Miguel Sánchez, portavoz de Ciudadanos, grupo con el que firmó un acuerdo de investidura en el que se contempla que dimitirá si es imputado por un caso de corrupción.

Respecto a la operación Púnica, Sánchez aclaró que en el informe de la Unidad Central Operativa (UCO), el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco y seis fiscales reconocen que no se firmó ningún contrato, ni se pagó una factura o se dio instrucción para cerrar un acuerdo. «No hubo nada», sentenció.

Sánchez ha respondido al portavoz socialista, Rafael González Tovar, que ninguno de esos supuestos delitos de los que se le acusa «se podrán demostrar porque no se puede demostrar lo que no existe». «No es no, ¿qué parte no entiende?», ironizó, en alusión al lema del ex secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, sobre su negativa a apoyar un Gobierno del PP.

En la respuesta al portavoz de Ciudadanos, Sánchez negó que hubiera participado en una trama, y comparó su situación con la vivida en el año 2016 por parte del partido naranja cuando el grupo parlamentario en la Asamblea Regional cargó gastos electorales a su presupuesto. El presidente murciano dijo a Miguel Sánchez que en el PP fueron «justos y prudentes» con Ciudadanos y esperaron a que el Tribunal de Cuentas dictaminara que no se le puede imputar delito contable porque devolvieron el dinero.

Pedro Antonio Sánchez, que gobierna en la Región gracias al acuerdo de investidura con Ciudadanos, cree que «no es el momento del linchamiento político», y advirtió este jueves al portavoz de la formación naranja, parafraseando a José Ortega y Gasset, de que «cuando la realidad no se interpreta bien, esta empieza a pensar su venganza». Desde la oposición, el portavoz socialista González Tovar criticó que Sánchez utilice a la Fiscalía y a ministros del Gobierno central para «lavar su imagen», y le reclamó que dimita porque «no tiene calidad democrática» y para «no dañar más a los murcianos».

Finalmente, el portavoz de Ciudadanos calificó como «desliz» que el presidente afirmara que conocía el posicionamiento de los fiscales en el caso Púnica, y le recordó que las expectativas sobre su situación judicial «no son nada halagüeñas».