El vinilo ya tiene top ten semanal

m. piñeiro

CULTURA

Los discos de acetato volvieron a las listas de más vendidos en Gran Bretaña. Esta semana la encabeza la banda All Time Low

14 abr 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El vinilo ha vuelto para quedarse y por eso los británicos han decidido que ya es hora de contar cuántos se venden y cuáles tienen más éxito. No es una vuelta a los setenta, sino el reflejo de una época nueva en la que las ventas del CD cae en picado mientras las de los LP suben, nada menos que un 70 % en el 2014 (los singles se han de conformar con un 23 %). Aunque todavía modestas -1,3 millones de discos-, desde hace 18 años no alcanzaban estas cifras de ventas.

Para celebrarlo, la empresa británica Official Charts Company, que se encarga de enumerar la lista de los top semanales, ha anunciado que el vinilo tendrá categoría propia. A partir de ahora, cada domingo a las siete de la tarde se sabrá qué artista ha vendido más los clásicos long play y sencillo.

Del primer ránking de este regreso, fue All Time Low la banda ganadora con Future Hearts; le siguen los ingleses Drunge, con Undertow, y el cantautor norteamericano Sufjan Stevens cierra este singular podio con Carrie&Lowell.

¿Y qué dicen los ganadores de esta primera lista? Alex Gaskarth, líder de All Time Low, explicó en la web de Official Charts: «Lo que está pasando con el vinilo en este momento es realmente genial. Lo que me encanta es que hay diferentes mundos de los fans de vinilo: hay los amantes de la música que adoran el sonido de vinilo, las personas que lo compran para ser dueños de una pieza de coleccionista, y luego gente como nuestros fans, que compran nuestro vinilo simplemente para colgarlo en la pared».

Tal vez no se deban hacer ilusiones los de All Time Low, porque Noel Gallagher es el que más vinilos ha vendido en lo que va de año, seguido de Led Zeppelin, Arctic Monkeys y Royal Blood.

Claro que si bien las ventas de discos se han disparado en los últimos tiempos, estas siguen siendo muy minoritarias. En el 2014 en Gran Bretaña se gastaron 1,8 millones de euros en acetato, frente a los 200 millones de euros que generó solo Spotify en el país un año antes.