O Maio e A Madalena desfilaron en Lourenzá, sin Cuco y en remolque

Inmaculada Eiroá González
inma eiroá LOURENZÁ / LA VOZ

A MARIÑA

Un concurso de adorno de sombreros y balcones floreados para «facer parroquia»

02 may 2017 . Actualizado a las 22:25 h.

Fiel a sus tradiciones, pero con algún que otro toque de modernidad e introduciendo algunas iniciativas para «facer parroquia» celebraba ayer Lourenzá su Festa do Maio. Nadie quiere ser protagonista, pero el éxito de esta celebración, que organiza el área de Cultura del Concello, seguramente se consigue, año tras año, gracias a la colaboración de un grupo de incondicionales, entre los que se encuentra Társila Irimia, Pepita de Villalba, Celia, Lastra, Ortensia, la propia María José López... Son quienes se encargan de adornar el maio, la Madalena y la carroza en la que esta, encarnada por Soledad Cajoto, desfila por las calles de la localidad. Empleados municipales madrugaron para ir a buscar las xestas y fiuncho (retama e hinojo) que se utilizan como elemento base, acompañados de flores, para los adornos. Dice la copla tradicional: «Aí ven o maio coas súas flores/ e a Madalena con outras mellores./Levántate burro que tanto dormiches/ que xa pasou o maio e ti non o viches». El burro hace ya dos años que, efectivamente no ve el maio, ya que tras tirar del carro de la Madalena durante casi una década (primero Cuco y luego su sucesor Cuco 2º, que prestaba Suso Salvatierra), ha sido sustituido por un remolque y el vehículo de Protección Civil. Se pierde así el encanto y la entrañable aportación de estos borricos, pero se enriquece la fiesta con nuevas iniciativas, como el Concurso de Sombreiros do Maio, que ganó Xabier Berdeal González, de 3 años. No faltaron las golosinas y la diversión, incluido títeres de Mircromina.

Acial entregó los premios del certamen «Unha postal para mamá»

Durante la celebración también se entregaron los premios del concurso Unha postal para mamá, organizado por Acial. En la primera categoría, de hasta ocho años de edad, ganó Andrea García Díaz y en el apartado de entre nueve y catorce años, se llevó el premio Adriana Polo González.

Lo cierto es que la fiesta estuvo muy concurrida y los asistentes se lo pasaron en grande siguiendo a la carroza y al maio por las calles del casco y recogiendo los caramelos y golosinas que les obsequian los vecinos. Explicaba el concejal de Cultura, Manuel Arango, que es habitual que la comitiva vaya deteniéndose en aquellas casas donde saben que nunca faltan esos dulces regalos. El maio es una fiesta tradicional que Lourenzá conserva con mimo y que desde el Concello tratan de potenciar. Este año han invitado a los vecinos a adornar sus balcones.