¿Por qué se circula en sentido contrario por las autovías?

GALICIA

Despistes y confusiones están detrás de las peligrosas incorporaciones erróneas

10 dic 2009 . Actualizado a las 02:04 h.

Las patrullas de la Guardia Civil de Tráfico con destacamentos próximos a autovías y autopistas tienen muy claro cuál es uno de los mayores peligros de esas vías de alta capacidad: los conductores que circulan en sentido contrario. La intervención de estos agentes suele ser decisiva. Desde que reciben el aviso de que un conductor circula por la calzada equivocada, cuentan con menos de diez minutos para localizarlo e interceptarlo. Más allá de ese tiempo, el riesgo de accidente se multiplica.

La mayoría de las veces llegan a tiempo. En otras es imposible. Como en el accidente del martes en la A-52, en Ribadavia. Un conductor de 81 años al volante de un antiguo Volvo se metió en la autovía por el lugar equivocado. Y también en el día equivocado, el de regreso de un puente, y de noche, con todos los carriles ocupados y cruzándose con decenas de coches. La mayoría consiguieron esquivarlo, hasta que uno no pudo evitar el choque frontal. El conductor de 81 años murió en el acto.

La edad es un factor fundamental en este tipo de incidentes. «Tanto el caso de Ribadavia como el de Verín, de hace unos días, estuvieron protagonizados por conductores de edad avanzada. Tienen dificultades para acostumbrarse a las señales de las autovías y autopistas y se despistan», explica José Luis Ulla, coronel jefe de la Guardia Civil de Tráfico en Galicia. El coronel muestra su extrañeza por el hecho de que el conductor de Ribadavia «no hubiese reaccionado al ver tantos coches de frente con las luces encendidas. Es raro que no se hubiese extrañado y detenido el vehículo». En el momento en el que se produjo el accidente, alrededor de las siete de la tarde, la circulación era muy intensa hacia Vigo, por lo que el hombre, que conducía en dirección a Ourense, se cruzó con decenas de vehículos en los apenas novecientos metros que recorrió con su Volvo blanco.

Señales de dirección prohibida

¿Pero están bien señalizados los enlaces de autovías y autopistas para evitar que un coche acceda por el carril de salida? Los expertos aseguran que sí. Por regla general y como mínimo, las salidas de las vías de alta capacidad se encuentran señalizadas con los discos de dirección prohibida a ambos lados de la calzada. Esa fue la recomendación que hizo el año pasado la Guardia Civil de Tráfico al Ministerio de Fomento y a la Xunta como titulares de las autovías y autopistas de Galicia. «A raíz de unos casos de incorporaciones irregulares en la A-52, realizamos un informe para conocer el estado de las señalizaciones de las autovías y autopistas gallegas. Y el resultado fue bueno», afirma el coronel Ulla. Recuerda, eso sí, que se hicieron esas recomendaciones, sobre todo para que se colocasen señales de dirección prohibida a ambos lados de la calzada: «Entendimos que era necesario porque puede haber zonas en las que la configuración del carril impida ver la señal de un lado concreto».

Pero en general, afirma, las señalizaciones son correctas y están bien situadas: «Se colocan las de dirección prohibida, que deberían ser suficientes. Y poco más se puede poner para no interferir en el tráfico de salida».

Lo que sí tiene claro Ulla es que, salvo los escasos casos en los que se detectó presencia de alcohol o drogas en los infractores, los conductores que se incorporan por los carriles de salida lo hacen por error. Una confusión o un despiste llevan a circular irregularmente por una autovía frente a coches que van correctamente. Así lo cree también Máximo Cid, del grupo PAT de prevención de accidentes de tráfico, con sede en Ourense. Expone que en la mayoría de los casos es gente de edad avanzada la que acaba en una autovía o en una autopista circulando al revés de los demás. Cid no cree que sea una cuestión de mala señalización, sino que hay determinadas personas que pueden llegar a confundirse con más facilidad al elegir el camino correcto. «Hay un perfil en estos casos: gente mayor que se despista y que cuando se ve en la autovía no sabe cómo reaccionar».

Por suerte, conducir en sentido contrario por una autovía no es algo frecuente. En Galicia se dan unos 12 o 15 casos al año. Pero sí tiene gran relevancia porque representa uno de los mayores peligros. Los conductores confían en no encontrarse a nadie de frente en una autovía. Y cuando se lo encuentran, la situación siempre es límite.