En decenas de carreteras de la red secundaria de las cuatro provincias se registraron siniestros y circulación lenta
21 ene 2009 . Actualizado a las 12:16 h.Un temporal desató ayer, por tercera vez en apenas mes y medio, una situación crítica en la red viaria gallega. La autovía del Noroeste (A-6) y la autopista del Atlántico (AP-9), dos de las grandes arterias de comunicación de la comunidad, escenificaron con claridad la gravedad de lo ocurrido. La nieve y el granizo obligaron a cortar parcialmente la A-6 unas cuatro horas y la AP-9 durante una. Los problemas de tráfico fueron generalizados en decenas de carreteras de las cuatro provincias, en las que se registraron múltiples salidas de vías y accidentes sin daños personales de gravedad.
Lo cierto es que la jornada de ayer puso en cuestión la dimensión del operativo de emergencias, toda vez que, según las autoridades, se activaron todos los medios disponibles, lo cual no fue suficiente para evitar el corte temporal de dos infraestructuras clave. Y ello pese a que MeteoGalicia ya había avisado dos días antes de lo que se avecinaba, un temporal de una magnitud, según los meteorólogos, en absoluto extraordinaria en Galicia en esta época del año.
La A-6 fue ayer la vía peor parada por el temporal. Ante la fuerte nevada, la autovía operó con un solo carril en cada sentido de circulación en dos tramos, entre Becerreá y Lugo, y entre Baamonde y Guitiriz. Entre estos puntos se prohibió la circulación de camiones ante la posibilidad de que alguno quedase atascado en la calzada y forzase el cierre total de la vía. La situación, según la Guardia Civil de Tráfico de Lugo, duró aproximadamente hora y media (de 13.15 a 14.50) en el primero de los tramos y algo más de cuatro horas (de 9.26 a 13.40) en el segundo.
Las medidas adoptadas fueron una precaución forzosa, ya que al menos tres camiones que circulaban entre Baralla y O Corgo hicieron la tijera (el remolque se separa de la cabina al resbalar sobre el asfalto) poco después del mediodía, lo que provocó algunas retenciones y el cierre al tráfico de este tipo de vehículos en el aludido tramo entre Becerreá y Lugo.
En el caso de la AP-9, el corte del tráfico fue a causa de un accidente múltiple a la altura de Abegondo ocurrido a mediodía. Un conductor portugués perdió el control de su vehículo por una placa de hielo y fue golpeado por detrás por un autobús que se dirigía a Ferrol. En el siniestro se vieron implicados otro turismo y un camión.
Colas de 10 kilómetros
A consecuencia de este choque, la AP-9 quedó cortada entre Ordes y Mabegondo en ambos sentidos. Según Audasa, el tráfico en sentido a Santiago estuvo interrumpido quince minutos (hasta las 12.57 horas), mientras que la circulación hacia A Coruña se abrió con un carril a las 12.35 horas y ya completamente (con las dos vías) a eso de la una y cuarto de la tarde, esto es, una hora después del siniestro. Un agente de la Guardia Civil que controlaba el tráfico en la zona explicó que, a raíz del choque, se llegaron a formar colas de turismos de hasta diez kilómetros.
Al margen de esta incidencia, la nieve y el granizo descargados entre Santiago y A Coruña ralentizaron la circulación hasta el punto de que se crearon grandes atascos en la entrada y salida del peaje de Ordes. La vía alternativa a la AP-9, la N-550, se vio saturada por los problemas en la autopista, una situación que se agravó a eso de las 13.00 horas por el accidente de un camión en Carral que llegó a cortar el tráfico unos veinte minutos.