La investigación no aclaró si además de Isabel Marcos participó otra persona en el asesinato La instrucción se encuentra ya conclusa y la causa está en manos del fiscal para calificar
20 sep 2005 . Actualizado a las 07:00 h.?oy se cumplen tres años del hallazgo en una fosa de Monfero del cadáver de Vanesa Lorente Jiménez. No obstante, lo que se conoce como el crimen de Monfero continúa todavía sin fecha de juicio. La investigación, en manos de un equipo de la Guardia Civil de A Coruña, poco más ha conseguido aclarar que lo que se supo entonces. Tampoco ha podido desvelarse si fue sólo Isabel Marco la autora material de la muerte. En el auto de procesamiento, la jueza instructora de Betanzos, Carmen Castro Pérez, apunta sólo a esta joven de Monfero, amiga de la víctima, como la principal sospechosa. El resto de los procesados (los padres de ella y el ex marido) lo son por colaboración o encubrimiento, bien en el enterramiento del cadáver bien por no denunciar el rapto del bebé de Vanesa, que fue recuperado en manos de Isabel. La Policía Local de Fene tuvo las primeras sospechas de que algo raro ocurría cuando, a mediados de agosto del 2002, Vanesa, de 22 años, desapareció de Perlío con su pequeño bebé, de pocos meses. Sus amigas preparaban una manifestación para demandar una investigación, ya avanzado septiembre, si bien la noticia del hallazgo del cadáver, el sábado 21 de septiembre, confirmó los peores pronósticos. Horas antes de que la excavase la fosa en la casa de los padres de Isabel, en Monfero, para desenterrar el cuerpo, unos agentes de la Guardia Civil de Ferrol, autorizados por el juez Aulet Barros, llegaron a un piso de Miño donde la misma Isabel vivía con el que era su marido. Y, con ambos, el bebé de Vanesa. Bajo una de las camas de la vivienda, los agentes encontraron ropas de la madre del pequeño. La investigación transcurrió rápidamente durante esas horas pero luego se produjo un conflicto de competencias sobre qué juez tendría que ocuparse del caso. Aulet, por ser la chica de Fene (partido judicial de Ferrol), o el natural de Monfero (partido de Betanzos). A la postre el conflicto se resolvió en favor de Betanzos, y quedó en manos de Carmen Castro.