Bruselas ofrece 250 millones para una planta de captura de CO2 en León y 150 para la conexión eléctrica con Francia

Juan Oliver

ECONOMÍA

29 ene 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

La Comisión Europea está dispuesta a financiar con 250 millones de euros la construcción de una planta de captura de CO2 que recoja las emisiones de la central térmica que la empresa Endesa tiene en la localidad berciana de Compostilla, en el municipio leonés de Cubillos del Sil, cerca de Ponferrada. El proyecto forma parte de un listado con una treintena de actuaciones relacionadas con la energía, el medio ambiente y la sociedad de la información que Bruselas planea sufragar con cargo a su plan para la reactivación económica, y para los que destinará un total de 5.000 millones de euros.

De esa cantidad, la Comisión propone gastar 1.250 millones en una decena de instalaciones similares a la que acaba de empezar a levantarse en Compostilla, todas relacionadas con la captura, depósito y almacenaje de dióxido de carbono, y que se reparten entre Alemania, Polonia, Reino Unido y los Países Bajos. Cada uno de esos países recibirá la misma cantidad que España, que comparte su plan con el Gobierno portugués.

Bruselas prevé además destinar otros 500 millones al desarrollo de plataformas eólicas marinas, 1.025 millones para mejorar la red comunitaria de importación y transporte interior de gas, y 1.500 millones más para promover la extensión de la banda ancha para el acceso a Internet de alta velocidad, especialmente en las zonas rurales de los países del Este.

Red eléctrica

El Ejecutivo comunitario también contempla una inversión adicional de 705 millones de euros para la mejora de las interconexiones eléctricas transfronterizas entre los socios comunitarios. Entre las actuaciones que Bruselas se ofrece a financiar dentro de ese capítulo figuran la conexión España-Francia, que recibiría 150 millones, y la red hispano-lusa, en la que se gastarían 30 millones para mejorar los tramos en territorio portugués.

La Comisión Europea recordó ayer en un comunicado la necesidad de que tanto el Consejo como el Europarlamento aceleren los trámites para proceder a la aprobación de los proyectos y empezar su ejecución este mismo año o a más tardar en el 2010. Su presidente, José Manuel Durão Barroso, destacó que permitirán construir «una Europa más fuerte».