Spanair despedirá a 1.100 empleados y cancelará nueve rutas en Europa

Julio Díaz de Alda

ECONOMÍA

Scandinavian Airlines System, propietaria ?de la compañía, echará a la calle a uno de cada tres empleados

17 jul 2008 . Actualizado a las 02:45 h.

Scandinavian Airlines Systems (SAS) lo advirtió la semana pasada, y ha cumplido con su amenaza. La empresa despedirá a 1.100 trabajadores de Spanair -de la que es propietaria al 100%-, cancelará nueve rutas deficitarias en Europa y dejará en tierra 15 aviones para intentar salvar de la ruina a la que hoy es la segunda aerolínea de España. Así lo explicó ayer Marcus Hedblom, director general de Spanair.

La subida del precio del petróleo, que supone cerca de un 35% de los costes de las compañías aéreas, y la intensa competencia que vive el sector ha obligado al grupo escandinavo a presentar un plan de ajuste que ha dejado temblando a los sindicatos, que aunque temían un recorte no esperaban que fuera tan agresivo. En principio, SAS aspira a pactar con los representantes de los trabajadores todos sus pasos, con los que prevé ahorrar 90 millones de euros el próximo año.

La enorme crisis que atraviesa el sector aeronáutico se cobra sus primeras víctimas en España. Era más que seguro que Spanair -que perdió 40 millones de euros en el primer trimestre- tenía que recortar por algún lado. La única duda era el tamaño de la tijera, y ahora ya se conoce. El programa que los escandinavos han traído bajo el brazo supone poner en la calle a uno de cada tres trabajadores de entre los 3.800 con los que cuenta la aerolínea. De los 1.100 despedidos, 900 serán personal con contrato a tiempo completo, y el resto, eventuales. «Un verdadero palo», según confesaron varios empleados de la compañía nada más conocer la dimensión de la receta de SAS para tratar de garantizar la supervivencia de la empresa.

Cancelación de vuelos

Hedblom y otros representantes de SAS explicaron las grandes líneas del plan de ajuste al comité de empresa. Un programa que está por definir, pues no se sabe aún el reparto de los despidos por categorías ni secciones, ni las bases que resultarán más afectadas. Lo lógico es que el mayor impacto caiga sobre Palma de Mallorca, donde la aerolínea tiene su sede central y emplea a 1.200 personas. Por ahora, lo único definido son las rutas que Spanair dejará de cubrir. Serán las que unen Madrid con Viena, Múnich, Gerona, San Sebastián, Granada y Oviedo, así como la que enlaza Barcelona con Zúrich y las Bilbao-Málaga y Bilbao-Jerez.

El abandono de estos aeropuertos deja en ellos una vía libre a Iberia, que trata de fusionar Clickair y Vueling y debe justificar ante la Comisión Nacional de la Competencia que la alianza no la convierte en operador dominante. Spanair pierde dinero con muchas más rutas que, sea por la razón que sea, por ahora se salvan de la quema. Aun con este recorte, la aerolínea operará el 80% de su red, con 260 vuelos diarios a 48 destinos