El capitán del Pontevedra, Vázquez, cumplió la sanción de 4 partidos por insultar al árbitro la temporada pasada
21 sep 2009 . Actualizado a las 02:53 h.El árbitro asturiano José Ramón Piñeiro Crespo consiguió sacar de sus casillas al capitán del Pontevedra, Alejandro Vázquez, en el encuentro contra el Lugo que se jugó la temporada pasada el 12 de abril en el Anxo Carro. Al término del partido Vázquez, un jugador habitualmente templado, hizo unas durísimas declaraciones contra el colegiado. Lo acusó de borracho y cojo, por lo que fue sancionado con cuatro partidos.
El central granate consideró su acción de «una calentura y explica: «Fue el mismo árbitro que nos había pitado un partido en nuestro campo y la noche anterior había armado un jaleo en el hotel. Luego contra el Lugo, le pegó un tirón y estaba cojo. Para nosotros era un partido trascendental para clasificarnos entre los cuatro primeros y perdimos 2-1 y no me contuve».
Nada más acabar el derbi vio un micrófono delante y se despachó a gusto en la Radio Galega: «Dije que el árbitro cuando no estaba borracho estaba cojo y no vio nada y me sancionaron cuatro partidos». Ayer cumplió el castigo y ya podrá jugar el miércoles en Santiago.
Insiste en que fue una calentura que, además, le salió «bastante cara». La espera se le hizo muy larga. «Ahora, una vez cumplida, tengo que empezar a competir».
Menos mal que por aquellas fechas el Pontevedra todavía no tenía el código ético que rige en la actualidad para jugadores y directivos. El club no le sancionó, aunque señala que «ya tuve bastante sanción con los cuatro partidos que me metieron».
Es un jugador clave en el equipo que probablemente le venga muy bien a Roberto Aguirre para ponerle freno a los goles que está recibiendo el equipo granate. Su calidad y experiencia le permiten seguir llevando los galones de capitán, aunque entiende que «cada jugador tiene un lugar en este equipo y una responsabilidad. Yo tengo la mía como capitán, pero soy solo uno más».
Está muy ilusionado con la vuelta a la competición y muchas ganas de aportar lo que tiene para el equipo ya que hay «mucha competitividad en la plantilla y todos podemos participar ya que este año se ha hecho un buen equipo y ahora tenemos la oportunidad de demostrarlo». No se atreve a considerarlo el mejor equipo de los siete años que lleva él vistiendo la camiseta granate, pero apunta: «Es difícil decirlo. En cuanto a calidad técnica le doy muy buena nota aunque hubo también muy buenos equipos antes. Lo importante es que logremos el ascenso».