El empate técnico (11 a 11) serviría de poco a Negreira, y el relevo en el BNG se traduciría en solo un escaño menos
12 dic 2010 . Actualizado a las 16:32 h.Como en las carreras de 100 metros lisos, casi habrá que recurrir a la photo finish para saber si es Javier Losada (PSOE) o Carlos Negreira (PP) el que se lleva el honor de conquistar a un mayor número de electores en A Coruña. Será el primero si se cumplen los resultados del Barómetro de Sondaxe, aunque solo por tres décimas. El empate técnico tiene una lectura positiva para los populares, que se traduce en once ediles, por encima de su techo histórico, pero otra negativa, pues aún se encuentra lejos de poder formar gobierno habida cuenta de que se antoja casi imposible una alianza con el BNG.
El que sí estaría prácticamente abocado a pactar de nuevo con los nacionalistas es Javier Losada. El alcalde socialista tendría -si cuaja el acuerdo y no opta por la opción de un gobierno en minoría- una entente menos cordial, a priori, con el nuevo líder del BNG, Xosé Manuel Carril, afín al sector más radical de la formación nacionalista. Carril releva a Henrique Tello como cabeza de lista y, a pesar de que algunos preveían una debacle -un dato: a Tello lo conocían en febrero, fecha del último sondeo, el 80,5% de los votantes y a Carril por el momento solo el 30,1-, el BNG apenas lo nota y solo baja de seis a cinco concejales y, curiosamente, esto no se produce por la pérdida de sufragios, sino porque se incrementa en tres puntos la participación en los comicios.
El sondeo no adjudica representante alguno a la formación Unión Coruñesa, liderada por Carlos Marcos, quien ya en el 2003 dio un serio aviso de que podría conseguir un escaño y ahora gana unas décimas en la valoración que de su trabajo hacen los coruñeses. No obstante, se mantiene a la cola de estimación entre los principales candidatos que concurren a las elecciones, aunque ninguno de ellos consigue el aprobado, cosa que sí hacen otros cuatro candidatos a la alcaldía entre las principales ciudades gallegas.
A seis meses de la cita electoral las diferencias entre socialistas y populares, las únicas fuerzas con opciones de conquistar la alcaldía, están más apretadas que nunca. No obstante, la crisis económica en la que está inmerso el país no ha generado una depresión excesiva en el socialismo coruñés. Mantiene Losada 11 concejales, los mismos que logró tras la era Vázquez. Si el poder desgasta -y en el sol o en la sombra Losada suma ya 27 años de gestión municipal- lo cierto es que también genera visibilidad: el alcalde podrá promocionar sus conquistas en materia de infraestructuras o en renovación de barrios, aunque no está muy claro si podrá presentarse con el aval del plan general. Además, algunos comerciantes y hosteleros están en pie de guerra, y los primeros acaban de manifestarse pidiendo más apoyo municipal. Negreira intentará sacar petróleo de toda esta situación, y de los conflictos urbanísticos. El tiempo corre en su contra (tiene 6 meses para conseguir 4 ediles si quiere ser alcalde), pero Losada también tendrá que calcular muy bien sus pasos.