El alcalde, Javier Losada, está estudiando la propuesta definitiva que el arquitecto Alejandro Zaera Polo ya ha planteado al gobierno municipal para la remodelación de la plaza de María Pita y la eliminación de las polémicas terrazas. Desde el Ayuntamiento no quisieron desvelar los pormenores de la propuesta, aunque sí explicaron que todavía «no hay nada cerrado» y que, por lo tanto, se sigue trabajando para conseguir una solución consensuada y que esté acorde con el porte monumental de todo el entorno.
Alejandro Zaera estuvo en A Coruña el pasado mes de diciembre, ocasión que aprovechó para tratar personalmente con el alcalde su propuesta definitiva. Según ha trascendido, el proyecto ha sido recibido de forma satisfactoria por parte de los responsables municipales, aunque los técnicos del estudio Foreign Office Architecture (FOA) tendrán que introducir pequeñas modificaciones en su propuesta. Se trata de temas menores, fundamentalmente relacionados con el mobiliario urbano.
Inicio de los trabajos
Aunque el alcalde encargó a Zaera hace ya dos años la elaboración de un estudio estético para la remodelación de la plaza de María Pita (por importe de 30.000 euros), el estudio de arquitectura con sede en Barcelona y Londres no pudo comenzar a trabajar en el proyecto hasta marzo del 2009. La razón es que el contrato no se cerró oficialmente hasta esa fecha. Entonces se planteó que la propuesta definitiva podría estar lista el pasado mes de junio y que, si el gobierno municipal aceptaba las recomendaciones de Zaera, los cambios en la plaza de María Pita podrían comenzar a ejecutarse a finales de año. Sin embargo, los plazos se han retrasado y la diagnosis sobre los problemas urbanísticos en la plaza no llegó hasta finales del 2009. Quizás este retraso pueda influir en los planes del gobierno municipal, que el pasado verano había mostrado su intención de retirar todas las terrazas de su ubicación actual antes de las próximas elecciones municipales, que podrían celebrarse en mayo del 2011. Los responsables locales calculaban que en el plazo de dos años el proceso podría haberse completado.
De hecho, el Ayuntamiento ordenó a lo largo del 2008 la retirada de varias terrazas que estaban en mal estado y, el año pasado, la eliminación de la que funcionaba como sede para el servicio municipal de información turística, que se trasladó a un local situado en uno bajo de las viviendas que rodean la plaza de María Pita. De todas formas, esa terraza de cristal continúa en su actual ubicación aunque ya no cumple servicio municipal alguno.