La promotora, Makiko Sese, estará mañana en el centro Finis Terrae
01 abr 2011 . Actualizado a las 06:00 h.La corriente de solidaridad que ha despertado la catástrofe que ha azotado Japón llegará mañana a Cee a través de una curiosa iniciativa que bebe de una de las tradiciones más características de la cultura nipona, el origami (aquí conocido como papiroflexia). Tras el terremoto y el maremoto del 11 de marzo, una japonesa afincada en Madrid, Makiko Sese, inspirándose en una leyenda que dice que aquel que elabore mil grullas de papel conseguirá hacer realidad un deseo, decidió hacer un llamamiento a través de la red para afrontar este reto y enviar las aves de papel al norte de Japón.
Su petición tuvo una gran acogida y ha llegado también hasta Cee, donde los responsables del Centro Comercial Finis Terrae -con la colaboración del Concello y de Animatium- han decidido aportar su granito de arena promoviendo que los vecinos de la localidad puedan confeccionar sus propias grullas.
Desde las 17.00 horas de mañana, varios profesores de origami enseñarán a los presentes a darle forma al papel para convertirlo en una obra de arte cargada de simbolismo. Además, promoverán que los centros escolares hagan lo propio en las clases de manualidades.
La propia Makiko Sese tiene intención de acudir a Cee para agradecer la colaboración de los vecinos de una comarca, la Costa da Morte, que según ella misma explica está unida por los lazos de la solidaridad con Japón desde la catástrofe del Prestige, puesto que fueron varios los voluntarios nipones que colaboraron en la limpieza del chapapote. Por eso, explica «desde donde muere el Sol? niños y adultos quieren mandar su abrazo a los hermanos del Sol Naciente».