Llegaron el lunes por la tarde y se fueron ayer por la mañana. El submarino y el buque anfibio de asalto de la Marina de Argelia, que tanta expectación han generado a lo largo de la semana, abandonaron la bahía de Fisterra, en la que permanecieron, según la explicaciones oficiales, por previsión de mal tiempo en su ruta hacia San Petersburgo.
En Fisterra no hubo explicaciones de ningún tipo. El portavoz de Terra Galega, Xan García, dijo ayer que el alcalde debería haberlas exigido a las autoridades competentes, para saber qué hacían allí y qué transportaban.
En la tarde del jueves ya no hubo facilidades para acercarse hasta el submarino. El Don Inda , el buque de salvamento marítimo y remolcador, advertía a los barcos que navegaban por sus inmediaciones que se alejasen de la zona. También llegó hasta el área de Fisterra el buque patrullero Tabarca , de la Armada Española.
Termina así una visita que ha generado gran expectación no solo en Fisterra, sino en toda la comarca.