La plantilla de la concesionaria Termavi reivindica que se readmita a nueve compañeros despedidos.
15 dic 2009 . Actualizado a las 21:31 h.La huelga de la plantilla de la firma concesionaria Termavi en el muelle de contenedores se ha iniciado esta madrugada, a las 00.00 horas, pero ha empezado a tener una incidencia real a partir de las seis de la mañana, hora a la que llegaba el primer portacontenedores. La huelga ha sido convocada para los cerca de70 trabajadores que componen la plantilla de Termavi, tras despedir la empresa a nueve empleados.
Los piquetes han iniciado a las ocho de la mañana su labor en los accesos al muelle de Guixar y han llegado a cortar el tráfico en la rotonda que une el túnel de Areal con García Barbón y la AP-9. Posteriormente han continuado sus protestas con un recorrido a pie hasta la sede de la Autoridad Portuaria, a la que exigen un posicionamiento claro en este conflicto.
Los trabajadores aseguran que en las primeras horas de paro ya se han notado los efectos en la descarga de mercancías en el puerto vigués con retrasos de hasta una hora en los primeros barcos, aunque desde la empresa insisten en que el muelle funciona con normalidad con incidencias que no superaron el cuarto de hora.
Los trabajadores mantienen su objetivo de paralizar por completo la descarga de contenedores en Guixar y, por ello, han impugnado los servicios mínimos decretados ya que los consideran abusivos porque obligan a trabajar a prácticamente la mitad de la plantilla. Desde lo sindicatos también denuncian que se han contratado a trabajadores a través de empresas temporales para cubrir las bajas provocadas por la huelga.
Según el calendario de llegadas del Puerto de Vigo, estaba previsto que esta semana hiciesen escala en la terminal de Guixar en torno a nueve buques, con una cifra indeterminada de contenedores que deben embarcar o desembarcar, pero que no estaría lejos de los 3.000 o 3.500 contenedores durante toda la semana. Algunas navieras con oficinas de representación en la ciudad, precisamente en previsión de que la huelga se produjese con toda intensidad, estudiaron la posibilidad de desviar buques a los puertos de Leixoes (Oporto) y Marín, para evitar el colapso de sus recipientes a su llegada a la terminal de Guixar. Según el diario de explotación del puerto, no consta ninguno de estos desvíos.
La convocatoria de huelga es indefinida y los trabajadores mantienen que no volverán al trabajo hasta que se readmita a los nueve despedidos.