«Llevo dos años esperando la licencia para poder vender perritos calientes en la zona de Churruca»
VIGO
«¿Qué pasa con Urbanismo en Vigo?, Hace dos años que tramité una solicitud de habilitación de un local de hostelería y todavía no tengo ninguna respuesta. Hace un poco más de una semana me llegó una carta del Concello pidiéndome aún más cosas que presentar; yo me pregunto: ¿no están fuera de término?», cuenta Susana Pérez Leira.
Esta joven tiene a su cargo a su padre de 80 años y un niño de doce y se pasa gran parte de las noches en vela para poder despachar unos perritos calientes en la calle Irmandiños, un vial que no está humanizado, sino todo lo contrario.
Hace 20 días Pérez Leira presentó un recurso contra el Concello por silencio administrativo positivo «considerando que los términos legales están más que superados». El Ayuntamiento le ha pedido que el local cuente con campana extractora y con otras medidas antirruidos. «Yo vendo salchichas al agua. No hay plancha ni freidora ni música. Este local no huele porque no hay emanaciones», argumenta la hostelera. «Me gustaría recordar que todos los políticos de este país en cada discurso sobre la crisis hacen hincapié en la necesidad de crear puestos de trabajo incentivando a los ciudadanos a que pongamos negocios dando todas las ventajas posibles para que generemos nuestros propios ingresos. Ahora bien, yo hace dos años que le pago a rentas, el IVA, la Seguridad Social y un largo etc.» y explica que aporta al Estado más del 50% de sus propios ingresos.
«Pero sigo esperando la bendita habilitación de mi local, teniendo que lidiar con la policía, que viene todos los fines de semana», sentencia.