El Foro Social de Cangas logró ayer parar durante algo más de media hora las obras del puerto deportivo de Massó. Uno de sus integrantes, Antonio Sangabriel, logró colarse dentro del recinto vallado. Una vez dentro exigió, dando golpes en la puerta, que se la abriesen para salir. Se produjo un altercado con uno de los trabajadores, que aseguró que Sangabriel lo había amenazado.
Una vez abierta la puerta, el propio Sangabriel y otro manifestante se colocaron delante de la pala. Intervinieron los dos únicos agentes de la Guardia Civil que protegían las obras a esa hora, sobre las cinco y media de la tarde, identificando a varios de los concentrados.
Sangabriel mostró entonces, a gritos, su rechazo al puerto deportivo y a que la Guardia Civil proteja unas obras que insiste en calificar de ilegales. El concejal de Urbanismo cangués, Mariano Abalo, uno más de los manifestantes, fue el primero en tranquilizarlo. Los agentes optaron por marcharse y volver una hora más tarde, cuando los ánimos estaban ya más calmados.
Entretanto, el Foro celebró una reunión a un centenar de metros del recinto de obras. Acordó convocar una asamblea en la Alameda Vella de Cangas el próximo jueves, a las ocho de la tarde, y acudir al pleno a mostrar su rechazo a la actuación de la alcaldesa, que descarta paralizar las obras.
En la asamblea también intervino el edil de Urbanismo, quien lanzó duras críticas contra la alcaldesa y la empresa promotora del puerto deportivo. Llegó a decir que hay «políticos e políticas que están manchados». Anunció su firme decisión de seguir luchando para paralizar las obras.
Nuevo informe
Abalo hizo llegar a la regidora local el lunes una nueva petición de suspensión de las obras. La acompañaba con un informe del arquitecto municipal que dice que el ámbito del proyecto del puerto deportivo está desde el 2004 pendiente de la tramitación de un plan especial portuario y el correspondiente plan de utilización sin que a día de hoy estén ninguno de ellos aprobados.
El técnico municipal añade que la resolución de la Autoridad Portuaria que otorga la concesión a Marina Atlántica para construir el polémico puerto deportivo establece la necesidad de elaborar un plan de gestión viaria si el incremento del tráfico de camiones es significativo, «adoptando las rutas y franjas horarias que produzcan las menores molestias a la población».
El arquitecto concluye que dado que no existe este plan, es «inviable» el inicio de las obras. Abalo aporta este informe y otro, firmado por él mismo, para justificar ante la alcaldesa su solicitud de paralización de los trabajos
La regidora local le respondió el mismo día anunciándole que ordenó remitir esta documentación a la Autoridad Portuaria y pidiéndole que la mantenga informada de la ejecución de las obras por si se «estendesen a terreos fóra da zona de servizo do porto».