Un total de 904 tiendas y locales comerciales minoristas cerraron en Vigo y su comarca durante todo el 2008 y hasta febrero del 2009 (aunque abrieron 965 en el mismo período), la mayoría de ellos a consecuencia de la actual crisis económica, según datos de la Cámara de Comercio de Vigo. El presidente de esta institución, José García Costas, dibujó ayer un sombrío panorama para el año en curso a la luz de los datos que le proporciona una encuesta empresarial sobre las «malas» perspectivas del sector en la comarca de Vigo, compuesta por este municipio y los de Nigrán, Gondomar, Baiona, Mondariz, Mondariz-Balneario, Ponteareas, Salvaterra y As Neves.
García Costas, acompañado por la presidenta de la comisión de Comercio, Encarna Álvarez, presentó el primer informe elaborado sobre la coyuntura actual del comercio minorista en la demarcación de la entidad cameral. Según datos facilitados por la Cámara, en la actualidad hay un total de 6.741 licencias de actividad comercial en la demarcación territorial. Durante 2008 se produjeron 965 altas nuevas en el Impuesto de Actividades Económicas (IAE), y un total de 904 bajas, de las cuales 407 se registraron en el primer semestre de 2008 y el resto, 497, en el segundo semestre y los dos primeros meses del 2009, cuando comenzó a notarse más la crisis económica.
Los resultados obtenidos en el estudio confirman que los comerciantes han padecido en el último semestre del 2008 una seria reducción en sus ventas, como consecuencia de la actual crisis económica. Los efectos más acusados se manifiestan en los establecimientos dedicados a vestido y calzado y, atendiendo a la situación geográfica, en el centro de la ciudad de Vigo. Por otro lado, un 50% de los establecimientos declaran haber visto reducido su margen comercial en diferente medida.
Poca reducción de empleos
Es importante señalar también que, a pesar de las circunstancias adversas (de reducción de cifra de negocio y de margen comercial), los efectos sobre el empleo no han sido, todavía, importantes. Un 84,8 % de los empresarios del sector declara no haber reducido el número de empleados de sus negocios.
Con respecto a las expectativas para el primer semestre de 2009 los comerciantes encuestados se muestran mayoritariamente pesimistas, a la vista tanto de los resultados obtenidos en el último semestre del 2008, como de los datos de los índices macroeconómicos que periódicamente se publican, que vaticinan tiempos difíciles. El 75,5% de los encuestados cree que sus ventas seguirán disminuyendo en la primera mitad del 2009, y un 43% prevé que se reducirá su margen comercial en este mismo período. Sin embargo, preguntados por las expectativas sobre el negocio comercial a medio plazo, en el último apartado de la encuesta, los resultados son ligeramente más optimistas, ya que un 43,5% de los encuestados augura que «se mantendrán», frente al 38,6% que considera que evolucionarán negativamente.