O tren que me leva pasiño a pasiño

VIGO

El nuevo Talgo Tren Hotel que une Galicia con Barcelona y jubila al «Shangai» realizó ayer su viaje inaugural con un 50 por ciento de sus plazas ocupadas

27 ene 2009 . Actualizado a las 20:50 h.

Renfe desplegó ayer todos sus encantos mediáticos para el estreno del nuevo Talgo, el Tren Hotel Galicia, que jubila al mítico Estrella de Galicia, conocido como el Shangai, un tren de vapor que comenzó a unir Galicia con Barcelona a partir de 1951 y estuvo muy vinculado a la emigración gallega hacia Cataluña.

La flamante máquina equipada en su interior con todo lujo de detalles, es la primera de su tipo que circulará en España. Dispone de ejes de ancho variable, lo que le permitirá circular entre Zaragoza y Barcelona por la línea de Alta Velocidad Madrid-Barcelona, de modo que el tiempo de viaje entre Galicia y Barcelona se reducirá una media de dos horas.

Es una buena noticia, si empezamos a contarla por ahí. La mala es que en realidad, el recorte de 64 kilómetros entre Zaragoza y Barcelona, gracias a las nueva ruta de AVE entre las dos ciudades, y los 220 kilómetros por hora que el tren gallego a la Ciudad Condal podrá alcanzar al llegar a Aragón, dejan las 16 horas que tardaba el Shangai, en catorce. El tren sale diariamente de Vigo a las 18.23 horas y llega a Barcelona a las 08.45 del día siguiente. Mientras tanto, queda mucho tiempo para meditar y la compañía ferroviaria, ya que aún no puede ofrecer más rapidez, ha optado por ofrecer confort.

Félix Martín, director de servicios de Larga Distancia de Renfe, aseguraba ayer que «es sin ninguna duda, el tren nocturno más moderno de toda Europa. Nuestra apuesta es ofrecer todas las comodidades posibles a nuestros clientes y aumentar su espacio vital durante el viaje». En sus 156 de sus plazas cama en los vagones Gran Clase, hay aseo y ducha, detalles de diseño y funcionalidad e incluso un departamento especial adaptado para personas discapacitadas.

También llevan incorporada una pantalla de DVD con cuatro canales de audio y otros tantos de vídeo, donde se proyectan películas en versión original y dobladas. Curiosamente, una de las que anunciaban para el primer viaje era El paciente inglés . Y es que independientemente de la nacionalidad del viajero, la paciencia nunca sobra para completar los 1.331 kilómetros del trayecto. En el tren también hay otro tipo plazas: 192 butacas que por algo se llaman Gran Confort: 136 grados de reclinación en cada butaca y 133 centímetros de espacio para cada viajero (23 más que el estándar de los aviones). En el primer viaje, el tren llevaba ayer casi un 50% de sus plazas ocupadas desde Galicia: 80 desde Vigo, y 70 desde A Coruña, que se unen en Monforte para seguir juntos hasta Cataluña pasiño a pasiño , como cantaba Andrés do Barro.