El plan incluye charlas y visitas pese a que las instalaciones llamadas a acogerlas están desde hace 6 años destrozadas
21 nov 2008 . Actualizado a las 11:36 h.Dinamizar el parque natural de As Gándaras. Ese es el membrete de las cartas que llegan a Bruselas y piden dinero. Como si del tío rico de la familia se tratara, aquí se insiste. En el pasado fue la mancomunidad de Vigo la que hizo pucheros para conseguir 300.000 euros para un aula de interpretación de la naturaleza que, seis años después, está abandonada sin haber sido usada ni inaugurada. Las instalaciones tenían como objetivo dar vida al gran pulmón del sur de Pontevedra y se quedó en nido de vándalos o lugar de ensayo de grafitis.
Pero la hucha de Bruselas sigue llena, así que por el mismo motivo y en igual área se pide de nuevo más inversión. En esta ocasión, se trata de ayudar a la conservación de la laguna o la realización de talleres, charlas y visitas. Todo ello, pese a que el sitio llamado a albergar estas iniciativas, el centro de la naturaleza, está destrozado y sin posibilidad de que sus aulas, salón de actos y demás dependencias puedan tener utilidad a corto plazo.
El plan al que se acoge esta petición es el Life, una iniciativa europea que funciona desde el año 1992 y ha cofinanciado desde entonces 2.750 proyectos, en los que se ha invertido cerca de 1,35 billones de euros.
«Cuando el delegado provincial de Medio Ambiente nos pidió nuestro apoyo, estuvimos totalmente dispuestos, porque creemos que es necesario dar a conocer la riqueza medioambiental de As Gándaras», recuerdan desde la asociación de empresarios del polígono. De hecho, entre los integrantes de la formación se ofrecen ideas sobre las necesidades del parque, como la de mayor vigilancia.
Caza ilegal en la zona
«Hace poco tuve que llamar al Seprona porque estaban cazando las aves que hay en la zona y está terminantemente prohibido, ya que es un área protegida», recuerda uno de los empresarios. Por eso mismo apunta que una de las funciones que podría tener el centro abandonado es la de albergar un puesto para guardas forestales.
Precisamente su riqueza animal ha llevado a muchos especialistas al observatorio de aves que se encuentra en la zona. «Hubo un tiempo en que As Gándaras eran un referente entre los expertos, pero ahora está tan degradado que ya casi no lo visita nadie», apunta un aficionado de Vigo, que se acercó recientemente a la zona con su equipo.