Roberto y Lucas tampoco pudieron unirse al grupo y el medio está cercano a rescindir su contrato

J. V.

VIGO

22 jul 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

George Lucas y Roberto Sousa se presentaron en las instalaciones de A Madroa una hora más tarde que Lequi, tras pasar el reconocimiento médico, cuando la plantilla estaba a punto de terminar su primera sesión de entrenamiento a las órdenes de Pepe Murcia. El técnico les comunicó que no contaba con ellos y que no podrían entrenarse con el resto del grupo.

Tras una hora de trabajo en el gimnasio, el lateral abandonó las instalaciones visiblemente molesto por la decisión del club de apartarle del equipo y por el comportamiento que han tenido con él, ya que en junio cuando acabó la temporada le habían dicho que contaban con él y ahora se encuentra con esta situación.

Roberto Sousa se marchó con más caras de circunstancias, dejando el asunto en manos de su representante. El centrocampista brasileño tiene dos ofertas de clubes de Segunda División que estarían dispuestos a ficharle incluso aunque no haya conseguido la nacionalidad. Se espera que antes de final de año jure la Constitución y deje de ocupar plaza de extranjero.

La intención del club era cederle, pero su representante negocia la carta de libertad y en ese caso el jugador estaría dispuesto a perdonar una cantidad importante de lo que le adeuda el club, como ya ocurrió en los casos de Esteban y Fabián Canobbio.

Si ambas partes se ponen de acuerdo, Roberto estaría muy próximo a rescindir su contrato y podría abandonar Vigo en los próximos días, según reconocen en el entorno del jugador.

En el caso de George Lucas, su futuro dependerá de que aparezca un club dispuesto a admitir su cesión en las condiciones que le interesan al Celta, que son que dicho club asuma si puede ser el montante casi total de la ficha del lateral.

Acudirán a Balaídos

La intención del Celta es que todos los jugadores que deben entrenarse al margen del grupo lo hagan en el estadio de Balaídos, donde tienen un pequeño gimnasio a su disposición, y les pondrán un preparador físico.

De esta forma el club pretende evitar una posible denuncia por parte de los jugadores por impedirles hacer su trabajo. Ellos estudiarán de todas formas las acciones legales pertinentes. Tenían pensado acudir a A Madroa con testigos o un notario para dar fe.