La Xunta inicia la restauración del campanario del monasterio de Oia para frenar su deterioro

A. Martínez

VIGO

16 jul 2008 . Actualizado a las 11:42 h.

El campanario de la iglesia del monasterio de Oia recuperará dentro de poco tiempo todo su esplendor. La Consellería de Cultura ha iniciado ya las obras de rehabilitación de la majestuosa torre que es todo un símbolo del municipio.

Las obras cuentan con un presupuesto de 137.500 euros y un plazo de ejecución de dos meses. Este elemento arquitectónico ofrece estos días una estampa inusual al estar cubierta por todo el andamiaje desde el que trabajarán los expertos en restauración. Los operarios de Dicsa continuaban ayer colocando todos los soportes, como paso previo a la ejecución del proyecto.

La obra responde a una sentida necesidad del Concello por frenar el progresivo deterioro al que está sometido esta parte del conjunto declarado Bien de Interés Cultural.

La erosión y el paso de los temporales ha hecho mucho daño a la torre, que ha sufrido varios desprendimientos y que actualmente presentaba varias grietas que hacían peligrar su estructura. Así lo alertó en numerosas ocasiones el párroco de la localidad, Avelino Vaquero.

Estructura ladeada

Es motivo de preocupación en Oia el hecho de que el campanario se encuentre ligeramente ladeado. Esta obra era una actuación urgente para evitar males mayores en un inmueble que ya ha sufrido varios derrumbes en la zona de la sacristía y de la antigua residencia de los monjes blancos. El último percance tuvo lugar el pasado invierno, cuando se vino abajo parte del tejado, lo que obligó a la empresa Vasco Gallego a acometer unas obras de restauración.

La reforma del campanario complementa otra obra de la consellería de Cultura realizada en el templo durante los últimos meses. La pasada primavera finalizaron los trabajos de restauración del retablo mayor, que estuvo a cargo de la empresa Acanto. La limpieza y desinfección de esta obra artística permite ahora apreciar la belleza del conjunto en toda su magnitud.

Pero lo que los vecinos y amantes del patrimonio esperan es la rehabilitación completa del monasterio. La empresa Vasco Gallega sigue gestionando todos los permisos, una tarea difícil y más lenta de lo que podía parecer en un principio. El proyecto incluye la creación de un área residencial en el entorno especializada en la atención geriátrica.

También el entorno del monasterio de Oia se está beneficiando de otras administraciones públicas. La Diputación de Pontevedra mantiene avanzadas las obras de acondicionamiento de la bajada al embarcadero, en el barrio marinero del Arrabal. La inversión en este caso alcanza los 300.000 euros y contempla una nueva pavimentación y la instalación de aceras para mejorar la seguridad vial en la zona.