La programación de la futura estación del AVE tiene ya vía libre. Tras la larga polémica que en las últimas semanas mantuvieron el Ayuntamiento y la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas ha llegado la calma y ambas Administraciones, junto con el Ministerio de Fomento y el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), han cerrado un acuerdo, que se suscribirá el próximo 3 de noviembre con ocasión de la visita que el ministro de Fomento, José Blanco, hará a la ciudad.
Después del anuncio que realizó el alcalde la semana pasada en ese sentido y que se encontró con un rotundo desmentido de la Xunta, ahora sí parece ir en serio. De hecho, la Administración autonómica confirmaba ayer ese acuerdo a través de un comunicado triunfalista en el que indicaba que el ministerio había aceptado su propuesta para el diseño de la futura estación intermodal (terminal para el AVE y para el transporte público por carretera) al contemplar que esta participará, con carácter preceptivo y vinculante, en la aprobación del plan especial que decidirá cómo se desarrollará el actual ámbito ferroviario.
El alcalde refería ayer que esa participación se daba por hecha ya desde el pasado 21 de octubre, cuando en la reunión que todas las partes mantuvieron el día 21 en Madrid se acordó que el plan especial tendría que ser informado por la comisión de seguimiento del convenio, en la que estará la Xunta. Sin embargo, Bugallo no solo no cuestiona esa nueva cautela de la Administración gallega, pese a recordar la competencia del Concello en la aprobación de dicho plan, sino que ayer mismo le dio también su conformidad y admitía que «seguramente con isto a Xunta entende que garante máis» su participación en el diseño del ámbito. Pero ese no fue el único cambio que se le aceptó a la consellería sobre el texto que se elaboró el día 21. Hay otro relativo a los volúmenes edificables. Ahora ya no solo se habla de máximos, que se mantienen en la redacción, pero se introducen también que esos volúmenes serán «orientativos», lo que deja más margen, sin superar los máximos, a la hora de decidir su futura concreción o distribución. «Creo que a Xunta non quere quedar atada polo compromiso de que se en vez dos 53.000 metros cadrados ao final quedan 51.000, e creo que iso non está mal», dijo.
La Administración autonómica, por su parte, indicó que «sempre avogou» por una infraestructura que con el desarrollo de la ciudad y el constante incremento de las actividades económicas, sociales y culturales aportase una solución que facilite a los usuarios de la estación una eficiente interconexión de los distintos sistemas de transporte y que minimizasen la distancia a recorrer por los usuarios en sus desplazamientos entre las distintas modalidades de transporte de ese ámbito.