Alrededor de 50 niños del CPI de Rois podrían quedar sin comedor

SANTIAGO

29 sep 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Alrededor de 50 alumnos del Centro Público Integrado de Dices, en el municipio de Rois, que no son usuarios del transporte escolar y que pertenecen, en su gran mayoría, a familias de padres trabajadores, podrían quedar sin servicio de comedor el próximo curso. El comedor del colegio está, prácticamente, al máximo de su capacidad con 191 comensales pero, no obstante, el espacio no es el problema y sí el hecho de que tan solo hay dos personas para atender la cocina pese a que, según la norma de la Xunta, le corresponde un tercer trabajador -auxiliar de cocina- una vez que supera los 150 comensales.

El centro ya ha solicitado en más de una ocasión a la Xunta esa tercera persona para la cocina pero la respuesta siempre ha sido la misma: se deniega la petición en base a que, según explican desde el colegio, la consellería tiene otras «prioridades» y a que hay centros que están en peor situación. En vista de que Educación se mantiene en su negativa de no incrementar el personal de la cocina, y con ello cumplir la ley que la propia Administración educativa estableció en cuanto a número de trabajadores de cocina por comensales, el colegio acaba de celebrar una reunión con los padres para explicarles la situación.

De este modo, el centro educativo les comunicó que la «única opción» que le queda es, de cara al próximo curso, darle de comer solo al alumnado que tiene derecho a comedor gratuito en base a que es usuario del transporte escolar y no tiene servicio a mediodía para ir a comer a su casa. Con ello, el colegio anularía la oferta de plazas que quedan libres en el comedor y que ocupan aquellos niños que, en principio, no tienen derecho al servicio una vez que residen en las proximidades del centro. En este curso, el colegio recibió más de 50 solicitudes, todas ellas admitidas. El centro considera que las dos personas que trabajan en la cocina (una oficial y una auxiliar) no pueden estar «sobrecargadas de trabajo» día tras día y curso tras curso, una vez que tres días a la semana atienden a 40 comensales más de los que establece la ley autonómica. Y de ahí que haya adoptado la decisión de no ofertar más plazas que las obligatorias por ley, las que cubren los niños con derecho a transporte escolar y que no circula a mediodía.

El colegio explica que el trabajo de una persona más se notaría mucho ya que no es lo mismo una cocina con dos trabajadores que con tres. Además, en caso de que una de las dos enferme un día o, por motivos personales, no acuda al colegio, la otra se ve obligada a preparar ella sola la comida para 200 personas, sin contar otros trabajos como poner la mesa o limpiar. A día de hoy, las dos empleadas de la cocina trabajan más horas de las que les corresponde y hacen el trabajo de tres personas.