Un proyecto irrealizable en su actual solar

La Voz

SANTIAGO

28 mar 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Los constructores del centro imprimieron un gran ritmo a las obras con el objetivo de iniciar en él las actividades académicas cuanto antes, pero también para no apartarse excesivamente del plazo de entrega del edificio del Ensanche. Ese plazo (30 de abril) es ya inminente. «Tenemos un compromiso con el comprador, pero no pasa nada si hay un retraso razonable», explica Luis Peleteiro. Los avatares de la tramitación administrativa tienen la culpa de que el desalojo no llegue a tiempo.

Pero, tal como refiere el director del centro, influyó también la sensación de agobio en el actual edificio, no solo por su menor capacidad sino también por incordios como el traslado diario de 400 alumnos hasta las instalaciones deportivas: «Necesitábamos contar con el centro de Montouto, porque estos es claramente insuficiente. Es un edificio de más de 50 años con una serie de deficiencias, sobre todo para el proyecto que pretendemos». Cuando se construyó el Peleteiro, que pronto de convertirá en un centro comercial, residencial y de ocio, el Ensanche era un escenario libre de calles y viviendas.

La última fase en las futuras instalaciones es la construcción de la residencia estudiantil, cuya tramitación más lenta tiene que ver con el suelo rústico en el que se ubica el edificio.