La Cámara de Comercio manifestó ayer su disconformidad con la actual explotación económica del recinto ferial de Amio, supeditada a la celebración semanal del mercado nacional de ganado, y entiende que se debe abrir a actividades feriales expositivas para «rendabilizar as infraestructuras das que dispomos na actualidade». Así lo mantiene su presidente, Jesús Asorey, quien ayer terció en el conflicto que desde hace semanas mantienen el Ayuntamiento y los ganaderos usuarios del recinto tras el anuncio de Raxoi de que el próximo 9 de abril no podrá haber feria de ganados ante la imposibilidad de compatibilizar esa jornada con la instalación de Expovivienda. Los ganaderos, que hace días se manifestaron en la plaza del Obradoiro, sostienen que acudirán igualmente ese día a Amio.
Y la Cámara de Comercio terció públicamente en la polémica para apoyar al Ayuntamiento. Según Asorey, el organismo cameral no entiende «a postura radical e contraria dos gandeiros» y afirma que la rentabilidad económica de la feria ganadera para la ciudad es «practicamente nula, polo que non queda outra que compatibilizar tamén o seu uso». Sostiene el presidente de la entidad que los tiempos cambian y que las necesidades obligan a la ciudad a ser competitiva, una ciudad además en la que, recuerda, un estudio independiente encargado por la Xunta señala como la mejor posicionada frente a las demás urbes gallegas para celebrar certámenes feriales de tamaño medio.
El representante cameral insiste en que la ciudad no puede desaprovechar esa fortaleza de Compostela «por falta de instalacións que satisfagan as nosas necesidades reais e efectivas» y refiere asimismo que desde los años setenta ya hubo dos traslados del mercado ferial y que «agora haberá que pensar nun terceiro, debido ao propio desenvolvemento urbanístico da zona, pois en pouco tempo a feira de gando quedará no medio da cidade».