La autovía A-57, que debe conectar Pontevedra con la A-52 en O Confurco (cerca de O Porriño) para mejorar las comunicaciones con Ourense y Madrid, va camino de acumular otro año de retraso. Un informe de Fomento, dado a conocer ayer, confirma que el tramo Vilaboa-Soutomaior, clave para el desarrollo de la A-57, sigue congelado. El tramo, que abarca desde el límite con Pontevedra hasta los viaductos del Verdugo, lleva 18 meses parado y, según el citado documento, está ahora «en orden de estudio para la redacción del proyecto».
En contraste con esta situación, el tramo más adelantado de la A-57, entre Pazos de Borbén y Soutomaior, tiene ya el proyecto en redacción. Este proyecto fue licitado en marzo, dos días después de las elecciones generales, y adjudicado el 21 de julio. El proyecto tiene fijado un plazo máximo de 12 meses para su elaboración y se espera que esté listo antes del próximo verano. Fomento dispondrá entonces de seis meses para aprobarlo, licitar las obras y adjudicarlas, previsiblemente entre finales del 2009 y comienzos del 2010.
El trayecto entre el límite de Pontevedra y Soutomaior suma ahora nueve meses de retraso en relación con el tramo Pazos-Soutomaior. Aunque fuese licitado de inmediato, Fomento consumiría un mínimo de cuatro meses en adjudicar la redacción del proyecto, es decir, que la demora final es ya mayor de un año en estos momentos.
Esta desigual marcha de los trayectos se comprende menos si se tiene en cuenta que el estudio informativo previo y común fue aprobado para cuatro yrayectos de la A-57 en junio del 2007. En otros dos tramos, O Confurco-Padróns y Padróns-Pazos, Fomento ya licitó la redacción del proyecto.