Constatada la buena noticia que constituye el hallazgo de restos de las Torres Arzobispales, la teniente de alcalde responsable del Centro Histórico, Teresa Casal, dejó caer el jarro de agua fría: «Isto obriga a replantexar o proxecto de reforma desta rúa, que pretendíamos ter aberta para o Nadal. Xa vai ser prácticamente imposible cumprir esa data». Como primer paso, será necesario desviar las conducciones de agua y alcantarillado, para separarlos de la estructura arqueológica.
Con respecto al futuro de los restos localizados, Casal adelantó que «a idea xa vai polo camiño de que sexan visitables, de que formen parte dunha especie de circuito arqueolóxico que se podería facer en Pontevedra». Indicó que junto con el futuro Museo da Historia da Cidade se abriría la posibilidad de crear una ruta por la ciudad siguiendo el trazado de la antigua muralla medieval, toda vez que recientemente también se han sacado a la luz, en la zona del Campiño de Santa María, restos de la torre de los Montenegro, vestigios de la propia muralla y de un camino medieval enlosado.