Vecinos de Seixalbo temen que la antena de la red wifi tenga efectos nocivos

OURENSE

17 feb 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

La inminente llegada de la red wifi gratuita y libre a la parroquia de Seixalbo ha levantado la preocupación en un grupo de vecinos de este núcleo rural de la capital ourensana. Encantados con la medida municipal de proporcionar acceso gratuito a Internet, son más críticos con la ubicación elegida por el gobierno local para la instalación de una antena de repetición para señales wifi.

Según indica un grupo de vecinos, la estructura para facilitar la cobertura del proyecto Ourense wifi se ha instalado sobre un edificio que acaba de adquirir el Concello en el núcleo histórico de la parroquia, en la calle Estreita, número 1.

Esta ubicación es rechazada por este colectivo, ya que consideran que se realiza sobre un inmueble en mal estado y que se encuentra muy próximo a las viviendas. Su malestar lo trasladaron de forma oficial al Concello de Ourense, a través de un escrito registrado en la Subdelegación del Gobierno, donde solicitaron que «los servicios técnicos del Ayuntamiento evalúen la situación del edificio e inspeccionen el edificio» para evitar que puedan convertirse en un riesgo para los viandantes.

El problema para la salud pública que observa un grupo de vecinos ante la instalación de la antena de wifi va más allá de posibles desprendimientos por el mal estado del inmueble. Su argumentación también muestra su preocupación por los efectos nocivos que pudiera tener la antena de la red wifi y que, según aseguran, emiten contaminación electromagnética que «no estamos en la obligación jurídica de soportar».

Para justificar su rechazo a la instalación del repetidor en el corazón histórico de Seixalbo se refieren a diferentes sentencias judiciales que en su momento obligaron a paralizar el proyecto de implantación de acceso a Internet gratuito en ciudades como León. De hecho, en los últimos años se han producido movilizaciones de agrupaciones ecologistas y grupos vecinales para solicitar otro tipo de alternativas.

Futuro centro cívico

Curiosamente, el inmueble fruto de la polémica fue visitado recientemente por el alcalde de Ourense, Francisco Rodríguez, y la concejala de Sanidade, Marga Martín, que durante su estancia en la parroquia anunciaron que el emblemático edificio será reformado para acoger un centro cívico y social.

Pese a ello, parte de los vecinos consideran que «ha estado cerrado durante muchos años sin mantenimiento alguno y presenta en su fachada claros signos de deterioro, pudiendo esta infraestructura wifi debilitar más su precario estado y crear un peligro mayor» para los habitantes de Seixalbo.