A Gudiña se movilizó para pedir al obispado que no traslade a su párroco

J. M. G.

OURENSE CIUDAD

12 sep 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

A Gudiña vivió una mañana de viernes especial. Numerosos vecinos se reunieron en la plaza principal para protestar por el traslado de su párroco. El acto estuvo concurrido y cerraron varios negocios a esa hora. Con pancartas, los vecinos de la capitalidad y de todos los pueblos del municipio recorrieron un tramo de la travesía o N-525 y volvieron a juntarse en la plaza. Representantes de las ocho parroquias _A Gudiña, Tameirón, O Canizo, Carracedo, Erosa, Pentes, Barxa y A Capela declararon en público que les disgusta que se les vaya este sacerdote, Antonio Fernández Blanco. El párroco es ajeno a este movimiento vecinal, de hecho días pasados les dijo que no hiciesen nada.

«Seica marcha para unha parroquia de Cea», dijo un vecino. «Reuniuse moita máis xente da que esperabamos. había veciños emocionados», señaló Concha Estévez. Sigue la recogida de firmas, que esta siendo mayoritaria en todos los pueblos de A Gudiña. Pasado mañana se la presentarán al obispo. Desde el Obispado de Ourense no se ha hecho ninguna declaración al respecto porque el nombramiento del cura de a Gudiña no se ha hecho oficial todavía.

«O noso cura é moi apreciado por todos. Dedícase ao sei, non é interesado, relaciónase con todo o mundo, igual fala cun neno que vai visitar a un velliño, é moi dialogante e estar na misa que el celebra é atraínte porque na homilía dialoga cos fieis», explicó la señora Estévez.

Vida pastoral

Los vecinos esperan que se les escuche en el Obispado y que dejen que continúe con ellos su sacerdote. Antonio Fernández sigue haciendo su vida pastoral con normalidad entre sus feligreses los cuales no han podido resistir sin hacerse notar públicamente para pedir que no se lo lleven a otra parte de la diócesis. «Se o bispo non nos escoita irémoslle alí», señalaban, entre otras personas, Concha Estévez en plena protesta.