La presión puede con Bautista, que dimite de todos sus cargos en la SGAE

miguel lorenci MADRID / COLPISA

CULTURA

PP y PSOE acuerdan eliminar el canon digital y sustituirlo por otra fórmula de remuneración de la propiedad intelectual.

13 jul 2011 . Actualizado a las 12:09 h.

Eduardo Bautista ya no es el hombre fuerte de la SGAE. Se resistió como gato panza arriba, pero finalmente no pudo soportar la creciente presión desde múltiples frentes y renunció a todos sus cargos. Su férrea mano rectora, al frente de la sociedad de gestión de derechos desde 1995, aflojó ayer el puño. Teddy renuncia hasta que se aclare su situación judicial. Puso todos sus cargos a disposición de la nueva junta directiva, ante la que leyó con voz dubitativa un texto en el que ofrecía su renuncia. Sostuvo que se marcha «para no perjudicar a la casa» y que lo que ha hecho es luchar por los derechos de autor. La nueva junta expresó a Teddy Bautista su «agradecimiento» y «la mayor confianza en su honorabilidad».

Teddy se rendía diez días después de que la Guardia Civil entrara a su despacho en el suntuoso palacio de Longoria en busca de documentación y pruebas que testimoniaran el fraude que desde SDAE, la filial digital del SGAE, se venía cometiendo con su presunto consentimiento desde hace ocho años y que habría supuesto el desvío de al menos 30 millones de euros. Bautista estuvo preparando su carta de renuncia en su despacho desde primera hora de la mañana de ayer. Se reunió con varios técnicos y asesores para formalizar una renuncia que, de no haberse producido, habría provocado dimisiones en la nueva junta.

El juez Pablo Ruz imputa a Bautista los graves delitos de apropiación indebida, administración fraudulenta y delito societario, que podrían acarrearle una pena de hasta diez años de cárcel. Bautista quedó en libertad con cargos después de tres días de arresto y de prestar declaración ante el juez en el marco de una operación que ha llevado a prisión con fianza a otros dos altos responsables de la sociedad, José Luis Rodríguez Neri y Rafael Ramos.

Nueva junta directiva

Bautista renunció el mismo día que se constituía y reunía por primera vez la nueva junta directiva en la que la práctica totalidad de los miembros procedían de la lista que él respaldó: 7 de los miembros son del grupo de «gran derecho» -dramaturgos, compositores y coreógrafos-, 16 de «pequeño derecho» -compositores y autores de música-, 7 de audiovisual y 8 de editores musicales.

La junta nombró una comisión gestora formada por Ernesto Caballero, Álvaro de Torres, Imanol Uribe, Víctor Manuel y Tomás Marco, y que estará presidida por «un director externo e independiente de reconocido prestigio y con las máximas gestiones ejecutivas». Un nombre que se conocerá en 48 horas pero del que nada se dijo al término de la reunión. Miguel Satrústegui, subsecretario de Cultura entre 1987 y 1989, parece ser el mejor colocado en un quiniela en la que también están Álvaro de Torres, gestor de la discográfica Warner; Manuel Pimentel, editor y exministro de Trabajo, y Aldo Olcese, presidente de la Coalición de Creadores e Industrias de Contenidos.