Mika hace botar a 20.000 personas en el auditorio vigués de Castrelos

La Voz LA VOZ/VIGO.

OURENSE

16 ago 2010 . Actualizado a las 14:15 h.

Mika desborda simpatía, gracia y hermosura. Por lo menos esa es la impresión que se aprecia desde el patio de espectadores. Y así se mostró anoche durante la parada que su Imaginarium Tour realizó en el auditorio al aire libre de Castrelos y que logró congregar a unas 20.000 personas convirtiendo su recital en el más multitudinario de todos los celebrados en Vigo con motivo de sus fiestas.

En una noche suave, el músico británico-libanés se entregó totalmente a la teatralidad escénica, al baile y a desgranar canciones plenas de optimismo y alegría. El repertorio comenzó con una invitación a la despreocupación, y sonó Relax, take it easy. Con sus compases, Mika comenzó a saltar, junto a la cantante que le acompaña en el escenario. A partir de ahí comenzó un espectáculo bien trenzado en el que se iban dando sorpresas al público.

Mika, que dio las buenas noches al público y prometió hablar en español -aunque también advirtió que iba a cometer muchos errores y pidió disculpas de antemano-, mostró un gran poderío vocal y unas ganas tremendas de gustar y hacer disfrutar al público.

El mal gusto no tiene lugar a su alrededor y sus músicos se engalanan para estar en consonancia con el músico protagonista, que realizó varios cambios de vestuario. Por detrás, un colorido payaso lo dominaba todo.

El músico fue alternando, durante casi dos horas, algunas de las canciones más reconocidas de sus dos únicos álbumes. Any other world , Love today , Grace Kelly o Lollipop fueron algunos de los temas que rápidamente fueron contestados con alegría desde el patio de espectadores.

Una pena que el escenario de Castrelos no esté preparado para producciones con exigencias considerables. Esta circunstancia impidió que los espectadores pudieran ver el inicio del concierto que tenía previsto el músico. En otras ciudades, Mika entra en el escenario descendiendo del aire, vestido con un traje de astronauta y portando una maleta, al mismo tiempo que suena Así habló Zaratustra , de Richard Strauss.

Vida sana

Michael Holbrook Penniman Jr., nombre real de Mika, llegó a la ciudad el pasado viernes y se hospedó en un cinco estrellas ubicado en la zona portuaria. Sorprendió a los promotores del concierto con una serie de peticiones que no suelen concordar con los artistas que pasan por la ciudad. Muchas verduras, bebidas no alcohólicas y comidas reconstituyentes fueron algunas de las peticiones formuladas por el equipo de producción de Mika. Todas las personas que trabajan en su espectáculo tienen terminantemente prohibido el uso de drogas, motivo de despido inmediato.

Esa vida saludable se nota en directo con el continuo movimiento que imprime al espectáculo el músico libanés.

Mika es una de las grandes sorpresas del pop mundial de los últimos tres años. Desde la publicación de su trabajo de debut, Life in cartoon motion , el cantante se ha convertido en un icono de la música de baile. Nacido en Beirut, en el seno de una familia formada por una ciudadana libanesa y un norteamericano, se vio obligado a trasladarse a París debido a la guerra del Líbano, y, con posterioridad, se estableció en Londres.