La mitología de Rodin se exhibe en A Coruña con sus mejores obras

CULTURA

El comisario de la exposición destaca la «óptica inédita» de esta y su preparación durante unos tres años

25 sep 2009 . Actualizado a las 13:49 h.

A través de su proyecto La puerta del infierno, Auguste Rodin (1840-1917) se abrió al campo de las imágenes mitológicas, los misterios de la vida, la muerte, los castigos del más allá o los héroes malditos enfrentados con los dioses. Esa visión de la obra mitológica de Rodin es la «óptica inédita» de la exposición inaugurada ayer en el Kiosco Alfonso de A Coruña, según afirmó su comisario, Miguel Ángel Elvira. De dicho proyecto surgieron algunas de las obras más conocidas del artista como son El pensador o El beso que pueden verse en esta muestra organizada por la obra social La Caixa, en colaboración con el Musée Rodin de París y el Ayuntamiento de A Coruña.

Con el título de Robin y la mitología simbolista la exposición reúne 85 obras, la mayoría de ellas piezas en bronce, aunque también dibujos y la versión en yeso de la mencionada Puerta del infierno. La concejala de Cultura, María Xosé Bravo, destacó precisamente la posibilidad de «poder disfrutar dos bocetos do artista, dos que din os responsables do seu museo de París que teñen máis de 6.000, algo que non se pode comparar con ningún outro artista». Recordó asimismo la concejala que este artista «foi o auténtico revolucionario da escultura».

El director del museo que el artista tiene en París, propiedad del Estado francés, Dominique Viéville, no solo confirmó los datos apuntados por María Xosé Bravo sobre el número de dibujos, sino que que aportó otros nuevos sobre un centro que fundó Rodin un año antes de su fallecimiento y en donde se conservan «siete mil esculturas, seis mil dibujos, seis mil piezas arqueológicas y unas 25.000 fotografías».

Uno de los siete apartados de la muestra está dedicado a La puerta del infierno, un proyecto en el que Rodin trabajó toda su vida y donde «la muerte se presenta como prolongación del mito y del destino del ser humano».

En Vida y arte de Rodin se pueden ver algunas de las obras esenciales de la carrera del escultor como El hombre de la nariz rota, que el artista consideraba su primera obra importante, Los burgueses de Calais, Balzac o La catedral.

Otras secciones llevan por título Muerte, poesía y condenación, Los dioses primordiales y el Olimpo, El cortejo de Baco y los monstruos de la Tierra, El ciclo de Afrodita y Los creadores y su inspiración. En esta última está la vinculación del artista, señalada por el comisario de la muestra, Miguel Ángel Elvira, con autores como Balzac, Nietzsche o Baudelaire; de este último se recoge uno de los textos que aparece en Las flores del mal sobre la inspiración.

Elvira también destacó la prolífica actividad de un artista «que para algunos es un tanto antipático por su promiscuidad con las mujeres» pero del que, según el comisario de la exposición, hay que destacar su asombrosa producción «que parece superar las posibilidades de cualquier ser humano».