Caballero quiere silenciar las denuncias por nepotismo que lo acorralan

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VIGO

«Faro» protege al alcalde y a su equipo de las acusaciones que han llegado a la Fiscalía de enchufes de familiares en el Concello de Vigo

24 ago 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Faro de Vigo quiere cubrir con un manto de silencio las denuncias a las que se enfrenta Abel Caballero por corrupción. El rotativo de propiedad catalana está ocultando a sus lectores de forma reiterada todos los detalles de las graves acusaciones públicas vertidas contra el alcalde, que han llegado a la Fiscalía y que le atribuyen una trama organizada para enchufar en el Ayuntamiento a familiares de concejales y cargos del PSOE.

Apenas un par de breves han servido al periódico local para despachar las denuncias y acusaciones formuladas por el exalcalde socialista Carlos Príncipe, el grupo ciudadano Xuntos y el Partido Popular, entre otros. Faro no solo ha omitido los nombres de los concejales y los parentescos de los presuntos enchufados, sino que también ha ignorado las protestas de colectivos como la Federación de Asociaciones de Vecinos o la Rede de Solidariedade Popular. Estos y distintas formaciones políticas vienen reclamando infructuosamente al regidor que dé explicaciones a los vigueses.

La callada por respuesta que ha dado Abel Caballero cuando ha sido preguntado al respecto por varios medios de comunicación tampoco mereció ni unas líneas en el periódico del grupo Moll.

Faro protege los intereses de Caballero pese a que el caso se ha convertido en vox populi. La denuncia que partió de Príncipe toca de lleno también a la número dos del actual regidor del PSOE, la concejala y diputada en el Congreso Carmela Silva, por tener una hermana y tres cuñadas trabajando en el Concello. El periódico local le dedicó a la noticia el pasado día 14 una información a una columna en página par. Además, dedicaba la parte inicial de la información a desacreditar al denunciante y había que llegar al tercer párrafo, de un total de cuatro, para saber a quién afectaba la denuncia

Esta línea de decir poco para enmascarar y ocultar los hechos la mantuvo de manera todavía más destacada en los días siguientes, en los que Faro de Vigo no se hizo eco de las ruedas de prensa del propio alcalde o del PP en las que se abordó esta relevante cuestión.

También silenció por completo la reciente protesta en la Praza do Rei de la Rede de Solidariedade Popular, en la que se escucharon gritos contra Carmela Silva, la más estrecha colaboradora de Caballero, por contratar a varios de sus familiares en el Concello mientras tiene bloqueadas tres mil solicitudes de ayudas de emergencia municipal para familias necesitadas que dependen de ellas para comer o pagar el recibo de la luz.

No fue esta la única vez que ocultó información a sus lectores. El pasado martes una asociación ciudadana, Xuntos, había acudido a la Fiscalía para pedirle que investigara los presuntos enchufes denunciados por Príncipe. ¿Qué hizo Faro? Publicar un breve de quince líneas. Y para restarle todavía más trascendencia, ignoró que la Federación de Asociaciones de Vecinos Eduardo Chao, la única de la ciudad, había decidido que ya estaba bien de callar y que el alcalde de Vigo debía dar explicaciones públicas de su comportamiento a los vigueses, que le han elegido para gestionar el Ayuntamiento con un presupuesto de 228 millones de euros.

El proceso de ocultar y restar relevancia a las noticias sobre este asunto ha sido la norma en el diario local desde que estalló el escándalo. Da poca o nula información, no acuden a las ruedas de prensa, no se hacen eco de que el alcalde se niega a responder a las reiteradas preguntas de los periodistas y oscurecen noticias que no tienen más remedio que dar so pena de quedar todavía más en evidencia. Así hicieron, por ejemplo, cuando los críticos del PSOE local, con representación en el comité provincial y en el comité nacional del PSdeG-PSOE, se sumaron a la exigencia de explicaciones y a la demanda de que la dirección de su partido investigue lo ocurrido. Para Faro, esta petición solo mereció una noticia a una columna, lo máximo que se permiten en este tema, con otra quincena de líneas y sin mencionar en el título a quién quieren que se investigue.

La última perla se produjo este viernes. El rotativo de Chapela publicó una pequeña nota titulada El PP aboga por no judicializar la vida política. En rueda de prensa del jueves, el portavoz municipal de ese partido había elevado a más de 200 los enchufes de Caballero incluyendo su etapa en el Puerto. Faro volvió a ocultar esa información y no citó en ningún momento a Caballero ni que las denuncias eran contra él.