Patrocinado porPatrocinado por

Tejerina teme cambios «abruptos» en las cuotas del 2016

Cristina Porteiro
Cristina Porteiro BRUSELAS / CORRESPONSAL

PESCA Y MARISQUEO

Fernando Alvarado | Efe

España exige que se vele por el futuro del sector ante una previsible bajada para la xarda y el lirio

23 oct 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Al sector pesquero español le quedan por delante largas semanas en vilo. El anunciado descenso pronunciado de las cuotas de xarda y lirio para el año 2016, que tanto preocupa a la flota gallega, empujó ayer a la ministra española de Agricultura, Isabel Tejerina, a pedir a sus socios europeos reunidos en Luxemburgo que mantengan «medidas y criterios uniformes y válidos para todos» a la hora de negociar los totales admisibles de capturas (TAC) en todas las aguas de la Unión y que eviten subidas y bajadas «abruptas» de un año para otro. Lo hizo en la misma cita en la que se negociaron las posibilidades de pesca para la flota que faena en aguas del mar Báltico. Los ministros también trataron de alcanzar una postura negociadora común frente a Noruega, con la que se comparte la gestión de algunas poblaciones. Las conversaciones con el país nórdico arrancarán el 16 de noviembre en Copenhague.

Mortalidad por pesca

Los estudios científicos coinciden en la conveniencia de reducir la mortalidad por pesca en los stocks de varias especies de interés comercial para la flota, entre ellas la xarda y el lirio, que siguen sin recuperar los niveles óptimos de biomasa.

El Gobierno español asume que habrá un «recorte importante» de ambas cuotas, según fuentes diplomáticas, que no precisan a cuánto puede llegar ese descenso: «Tendremos que esperar a las negociaciones para empezar a hablar de cifras», aclaran. Por ello, Tejerina pidió ayer a sus colegas europeos que, además de tener en cuenta las cuestiones de carácter medioambiental, tengan presente las dificultades por las que atraviesa el sector para adaptarse a las exigencias de la nueva política común de pesca (PCP). «Todos trabajamos para la recuperación de los stocks pero, al mismo tiempo, hay que tener muy presente los condicionamientos socioeconómicos», aseguró antes de reafirmar, con ciertos matices, el compromiso de España de alcanzar el rendimiento máximo sostenible (RMS) para el 2020. «Si pedimos tiempo es porque no queremos que los pescadores tengan que abandonar su actividad», indicó. 

El interés de la delegación española estuvo también en las condiciones del acuerdo de sus vecinos del norte, que sentarán precedente para el reparto en el mes de diciembre de los TAC para las aguas del Atlántico, donde el sector pesquero gallego se la juega.

Por el momento, los armadores siguen pendientes de la propuesta de la Comisión Europea, que será presentada a principios del mes de noviembre, según confirman fuentes comunitarias.