«O lobo non é coma o de antes»

Xosé María Palacios Muruais
XOSÉ MARÍA PALACIOS VILALBA / LA VOZ

GUITIRIZ

Vecinos de cierta edad dicen que los animales tienen la piel más oscura y se acercan más a las casas

26 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El lobo es noticia con mucha frecuencia en Terra Chá en los últimos tiempos, ya que no solo ataca a vacas, caballos y ovejas sino también a perros, algo que antes no solía ocurrir. Pero además se ha alterado su comportamiento, pues se acerca a casas y se deja ver en lugares por los que no solía aparecer.

No son esos los últimos cambios, ya que vecinos de la comarca con una cierta edad, habituados tanto a ver lobos como a encontrar huellas suyas, aseguran que los animales han cambiado de aspecto y hasta de comportamiento ante los humanos.

«O lobo non é coma antes». Con 81 años, a Jesús Veres, vecino de la parroquia de Os Vilares (Guitiriz), está acostumbrado a ver lobos desde su juventud, y por ello los encuentra cambiados incluso en su apariencia. Dice Veres que los lobos de ahora tienen la piel más clara y los ojos más parecidos a los de los perros, pero además subraya que ahora; se acerca más a las casas.

«O lobo tiña antes moito que comer; agora, non. A fame dá coraxe. O lobo de antes non viña ao pé das casas», explica. Hace décadas, en esa parroquia guitirecense era habitual que los vecinos se alternasen para llevar el ganado a pastar, por lo que veía lobos con frecuencia. La última vez que lo vio, no encontró uno sino dos, que estaban brincando tranquilamente en un prado y solo escaparon cuando él estaba cerca de la finca: «O lobo de antes tiña moito á xente», recalca.

Dourino Prieto, vecino de Labrada (Abadín) de 75 años, coincide en la apreciación: «Non é igual». Subraya que el color de la piel de los lobos es ahora más claro a ; pero además cree que hasta ha variado de tamaño: «Son máis pequenos», dice. Prieto, que participó en monterías en su juventud, vio un lobo el año pasado. Él volvía de un prado donde pastaban vacas suyas, y un lobo de tamaño «medianeiro» y de pocos años estaba cerca de la pista; él no sintió miedo porque «o lobo non ataca á xente», pero el animal tampoco huyó y marchó del lugar sin echar a correr.

«Un pouco preocupante»

Carlos Pena, presidente del tecor Río Ladra (Vilalba) y de 61 años, de edad asegura que lo realmente novedoso es la frecuencia con la que el lobo se acerca últimamente a casas sin sentir el más mínimo temor. «Empeza a ser un pouco preocupante. Vese ao pé das casas, non se asusta nada», declara.

El lobo no solo aparece cerca de casas sino también en zonas de monte y de bosque por las que andan cazadores. Uno se encontró, hace pocas semanas, con un lobo en la parroquia de Nete, y el animal no se asustó ni emprendió la huida hasta que se le acercó a pocos metros.