Una mujer que, según el fiscal, se inventó que unos vecinos le habían dado una paliza, acabó ayer en el banquillo de acusados del Juzgado de lo Penal número 2 de Lugo. E. B. D., se enfrenta a una petición de condena consistente en el pago de una multa de cinco meses con una cuota diaria de 5 meses.
Según la acusación, la mujer llamó en la noche del 19 de agosto de 2009 al servicio de emergencias 112 para decir que había sido agredida. Hasta el lugar, el barrio de Pallota, en la parroquia de Xiá, acudió una dotación de la Guardia Civil. La mujer manifestó a los agentes que le habían pegado un matrimonio vecino y una hija contra todos los que formuló denuncia.
La citada demanda motivó que se abrieran unas diligencias previas. La acusada ratificó la misma y aclaró que había recibido patadas y puñetazos. Finalmente hubo un juicio de faltas tras el que los denunciados quedaron absueltos.
En dicho juicio la acusada volvió a reiterar que había sido agredida.
Mintió en un juicio
Por otra parte, M. B. M. M. también debía ser juzgada ayer por un delito de falso testimonio, sin embargo la vista quedó suspendida. La imputada acudió a un juicio, celebrado en Chantada en el año 2005. En el mismo, según el fiscal, adoptó un comportamiento falsario y con pleno conocimiento de que, con sus afirmaciones, faltaba a la verdad. Pretendía favorecer a la parte demandada que la había propuesto como testigo. El fiscal pide que le sea impuesta la pena de un año y seis meses de cárcel.
La acusada intentó demostrar que no mantenía relación de amistad íntima con el demandado, que no habían convivido juntos y que el sobre con la renta que le entregaba el demandado iba cerrado. La jueza que en ese momento presidía la vista acordó deducir testimonio contra la testigo por un presunto delito de falso testimonio. En el juicio se trataba de dirimir la resolución de un contrato de arrendamiento de un local comercial.